OPINIÓN

Lo que deja la derrota del gobierno

La caída de Macri

Los resultados contundentes y el rotundo fracaso sorpresivo de Macri, exhiben la debilidad de un sistema político viciado por la concentración mediática y la opinión hegemónica interesada.

La caída de Macri

Se acabó. Se terminó la mentira. El fracaso de Juntos por el Cambio en las elecciones fue estrepitoso, y los números de las elecciones fueron claros, Alberto Fernández le ganó a Mauricio Macri por más de 15 puntos. El Rey está desnudo y todos lo ven.

Inesperada. Sorpresiva, dicen algunos medios. La victoria del Frente de Todos no fue pronosticada por ningún medio ni por encuestadora alguna. Un ejemplo ilustrativo: Elypsis difundió una encuesta el viernes previo a la elección donde lo daban ganador a Macri. ¿Es solo impericia o hay otros intereses en juego? Esto corre también para los medios: el intento de construir una realidad de fantasía, pauta publicitaria de por medio, afín a los intereses del poder terminó chocando con la realidad. Los que describían las fabulosas vestiduras del rey que todos los argentinos debían apreciar, la "comunidad de interpretación" cayó en una sola noche de verdad. La Matrix quedó expuesta.  

Los argentinos exhibieron al rey desnudo. Tal como estaba. Porque a ellos no les puso plata en la mesa. Y plasmaron su mirada en un impacto silenciosamente construido y masticado día a día por los ciudadanos peso a peso faltante, con hambre, con bronca.

El pueblo habló. Y dió por el piso con la más gigantesca operación de ingeniería social montada para legitimar un discurso que apelaba al sacrificio de la gente, no de los banqueros o de muchos empresarios. Un relato que no hablaba del presente porque el bienestar siempre estaba en el futuro y la responsabilidad en el pasado.

Porque el macrismo no vive en el presente, pero los argentinos sí.

En una realidad con tarifas impagables, con una inflación vergonzosa, con sueldos que no alcanzan para llegar a fin de mes, con jubilaciones de miseria, con pobreza incontenible, con una indigencia vergonzosa, con miseria. Con un desempleo que está en dos cifras,alrededor de 20 mil fábricas cerradas y casi 200 mil millones de deuda adquirida.

Esta derrota no es sólo el fracaso de Macri. Es el fracaso de un sistema mediático concentrado, que debería ser repensado. De intelectuales orgánicos simpatizantes o comprados por el poder que con mucha soberbia se pensaron capaces de decirle a la gente que no se merecían una vida digna, que su destino era el sacrificio mientras los bancos y empresas hacían ganancias millonarias en dólares y debían esperar una recompensa incierta en el futuro. Aunque Cambiemos / Juntos por el Cambio es en principio no confesional, en la apelación al mito del sacrificio sintonizada con profundas creencias cristianas "alza tu cruz y sígueme".

En Jujuy los resultados también avalaron ese sentir popular. Tanto en la categoría de presidente como de diputados nacionales el pueblo dejó su mensaje. Y si bien en las elecciones de gobernador la administración de Morales fue ratificada (con la división del peronismo de por medio) el mensaje de las PASO fue claro: no queremos más de esto. Gerardo, que se jugó todo en su apoyo a Macri tendrá que repensar su rumbo. Su postura soberbia, sin rendir cuentas de viajes o tomando una deuda masiva sin importar las posibilidades de pago tiene ya poco espacio.

El rey está desnudo, el pueblo lo vió claramente y lo exhibió para que el mundo lo vea. Su mayor error fue creer en lo que sus aduladores: mediáticos, judiciales, encuestadores, le decían.

Ahora una nueva Argentina comienza. En las manos de Alberto Fernández está la posibilidad de entenderla y reconstruirla.

 



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