Como viene sucediendo desde el 2016, todo el sector de ciencia y técnica está sufriendo un gran ajuste que amenazan con la desaparición de organismos autárquicos como el Instituto Nacional Agropecuario Argentino INTA, CONICET e INTI entre otros que están siendo desmantelados.
Por estas horas, se espera conocer un nuevo recorte de presupuesto para el INTA Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, que lleva 60 años de una gran trayectoria.
Las consecuencias no son solo estructurales, sino de aumento de la desocupación y abandono de varios proyectos que viene desarrollando en territorio como por ejemplo el apoyo a la cría de camélidos, los llamados chacus de Vicuña (arreo y esquila comunitaria) específicamente en Jujuy.
Como ejemplo del avanzado trabajo desarrollado, en nuestra provincia, se puede mencionar que en abril del año 2015 Técnicos del INTA, lograron por primera vez el nacimiento de tres crías de llama usando embriones enfriados durante 24 horas. (Fotografía)
El 8 de abril se realizará una marcha nacional para pedir que se frenen los recortes presupuestarios, los trabajadores marcharán al Ministerio y al INTA.
Desde el gremio APINTA (Asociación del Personal del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) están trabajando desde un primer momento para que no se apruebe la resolución de recorte presupuestario ni se disminuya el personal. Hasta el momento han podido frenar despidos, aunque este año el gobierno quiere reducir la estructura a un 20%.
El impacto serían en tres IPAF regionales: el Instituto para la Agricultura Familiar creado para desarrollar tecnologías y aplicarlas junto al campesinado y comunidades indígenas. Existen 25 agencias de extensión distribuidas en el territorio, donde se asiste a campesinos productores. De manera que al sacarlas ellos perderían el apoyo y la atención técnica.
El INTA es el único organismo en América Latina que tiene el sistema de extensión (asistencia técnica gratuita) e investigación.
El delgado de APINTA Jujuy, David Galean , destaco que “este gobierno no valora lo que es la extensión y la agricultura familiar, miran más a las grandes empresas que manejan los gremios de esas empresas como son Sociedad Rural, Coninagro, CREA, ellos aconsejan y han determinado el viernes pasado la reducción del 20% de la estructura del INTA”.
En Jujuy hay dos agencias de extensión que apoyan la agricultura familiar: una en Abra Pampa y otra en Hornillos, retirarlas originaría que los productores tengan grandes dificultades por falta de asistencia técnica.
Para que no se repita los de los 90, los trabajadores buscan evitar la reducción estructural y de personal porque luego se transforma en desempleo. Ante esta situación varias organizaciones campesinas se han solidarizado con el INTA para evitar los perjuicios a la producción rural y familiar.
Los trabajadores del INTA están movilizados en las estaciones experimentales de Yuto y de Abra Pampa y el IPAF (Instituto de Investigación para la Pequeña Agricultura Familiar) NOA en Hornillos, están además difundiendo lo que está sucediendo para evitar que el apoyo a la agricultura familiar y cría de animales cese.
“Este recorte perjudicaría todos los proyectos con camélidos, que cuenta con el apoyo del gobierno de la provincia junto a varios técnicos del INTA, otro proyecto avanzado en Jujuy es la producción agroecológica como valor agregado para la promoción de turismo entre otras líneas de trabajo” afirmó el trabajador.
En el 2018 se aprobó un presupuesto con un mínimo de aumento, y vienen trabajando con gastos básicos, ahora sólo justifican la inversión en sueldos pero no el gasto operativo en el campo, y a pesar que el año pasado se aprobaron 40 millones de refuerzo, solo se entregaron el 20% de las partidas,
Para el presente año el Congreso Nacional aprobó para la institución una asignación de $ 7531 millones mas un refuerzo de $ 400 millones para gastos operativos.
Pero el Poder Ejecutivo, haciendo caso omiso a lo resuelto por el Congreso Nacional, asignó para el primer trimestre del año $ 93 millones para gastos operativos cuando debería haber asignado 213 millones.
Esto significa que hubo una sustracción arbitraria por parte del gobierno de 120 millones de pesos en los primeros tres meses del año. A este ajuste presupuestario debe sumarse que desde 2015 a la fecha la planta de trabajadores y trabajadoras del INTA se redujo en 850 personas, producto de la no reposición de vacantes producidas por jubilaciones, retiros voluntarios y renuncias, dificultando la prosecución de trabajos de investigación y extensión y llevando a desmembrar equipos de trabajo que demandaron años de esfuerzo para su consolidación.
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