A día de hoy, prácticamente todo el mundo ha oído hablar de las imágenes de satélite, incluso si no ha llegado a usarlas en algún momento de su vida. Han supuesto una revolución en lo que respecta a la forma en la que podemos ver nuestro planeta y forman parte de las herramientas de trabajo en múltiples sectores.
Sin embargo, no toda la información disponible en las imágenes de satélite es visible por el ojo humano. Es ahí donde entran en juego los índices de vegetación, cálculos matemáticos basados en las bandas espectrales que forman parte de la luz y que no siempre son visibles. Gracias a ellos, podemos obtener información precisa sobre varios aspectos del planeta, como la cobertura terrestre, sin estar físicamente presentes en el lugar.
Aplicaciones de los índices de vegetación
En general, cada índice de vegetación funciona de una manera similar a como lo hacen el resto. Al haber diferentes índices de vegetación, cada uno de ellos funcionando en una longitud de onda distinta, no todos sirven para lo mismo. También puede darse el caso de que 2 índices puedan usarse en el mismo caso, pero, en función del objeto que se quieren analizar y las características que lo rodean, uno de ellos dé resultados más precisos que el otro.
En base a lo explicado anteriormente, los usos y las tonalidades de color mostradas en las imágenes pueden revelar diferente información. Por ejemplo, un índice de vegetación puede mostrar en colores verdes la vegetación sana y, en colores rojizos, las zonas con vegetación pobre o suelo desnudo, mientras que otro índice, en la misma área, puede revelar con colores claros la presencia de masas de agua y, con colores oscuros, las zonas terrestres. Así pues, las aplicaciones están supeditadas a la información que se quiera obtener y requieren de un conocimiento previo de la zona para poder ofrecer información útil al usuario.
Principales índices de vegetación
A medida que avanza el tiempo, el número de índices de vegetación no deja de crecer. Aunque todos ellos son útiles, no todos son igual de populares. Algunos de los índices de vegetación más usados son los siguientes:
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NDVI (Índice de Vegetación de Diferencia Normalizada): Posiblemente el índice de vegetación más conocido, desarrollado en la década de los 70, usado principalmente para monitorizar la salud y desarrollo de las plantas. El NDVI se apoya en la luz roja visible y la luz en el infrarrojo cercano para identificar la cantidad de clorofila en las plantas. Una de sus mayores desventajas es que no funciona bien si la vegetación es escasa o hay mucho suelo desnudo alrededor de las plantas.
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MSAVI (Índice De Vegetación Ajustado Al Suelo Modificado): Este índice es una variante del índice SAVI y está pensado para mitigar los efectos del suelo desnudo, de modo que puede proporcionar valores precisos sobre la vegetación en aquellos casos en los que el NDVI no funciona bien.
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NDMI (Índice De Humedad De Diferencia Normalizada): El índice NDMI es usado en sectores como la agricultura y la silvicultura para monitorizar los niveles de humedad en la vegetación y detectar las zonas del campo que sufren estrés hídrico. Es ideal para mejorar la planificación relativa al riego.
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NDRE (Índice De Diferencia Normalizada De Borde Rojo): Se trata de un índice de vegetación que combina la banda del infrarrojo cercano junto a una banda muy estrecha entre el rojo visible y la denominada zona de transición, de ahí el nombre de “borde rojo”. Su uso está recomendado, principalmente, en la fase de madurez de las plantas.
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LAI (Índice de Área Foliar): El LAI sirve para analizar la cantidad de hojas de un árbol o en una región. No tiene unidades y se calcula como la relación entre la superficie que ocupan las hojas y la superficie del suelo que queda en la sombra. Por ejemplo, si el valor de LAI fuese 2, significa que las hojas cubren el doble de la superficie del suelo en sombra.
Uso de índices de vegetación en EOSDA Crop Monitoring
Para que el uso de los índices de vegetación sea lo más productivo posible, es ideal contar con una plataforma que no solo te permite aplicarlos con apenas un par de clics, también que ofrezca acceso a diversas fuentes de imágenes de satélite. Es el caso de EOSDA Crop Monitoring, una plataforma en línea desarrollada por EOS Data Analytics que se basa en el uso de datos satelitales para monitorizar el campo.
La plataforma cuenta con varios índices de vegetación incluidos por defecto, como el NDVI, MSAVI, NDRE o ReCl. Además, la plataforma puede personalizarse de acuerdo a las necesidades del cliente, con lo que otros índices bastante comunes, como el índice EVI (Índice De Vegetación Mejorado), el LAI (Índice De Área Foliar), el NBR (Índice Normalizado De Área Quemada), el NDSI (Índice De Nieve De Diferencia Normalizada) o la pila de índices ISTACK (NDSI + NDVI + NDWI). Por si fuera poco, los clientes pueden solicitar la creación de un índice personalizado. Estos índices pueden tener desde pequeños cambios, como una paleta de colores diferentes o adaptado a un cultivo en particular, hasta la creación desde cero si se dispone de una fórmula específica.
Gracias a todos estos índices de vegetación, podrá obtener conocimiento del que no disponía previamente y una experiencia rica en información que le permitirá hacer frente a sus desafíos empresariales.