Esenciales durante la pandemia, trabajadores de la salud quiere que sus salarios sean acordes la importancia de su labor, en ese contexto, ATSA y FATSA habían anunciado un paro por 24 para este jueves en el sector privado de sanidad, medida que debió suspenderse por la aplicación de una nueva conciliación obligatoria decretada por el Ministerio de Trabajo de la Nación, pero que profundizó el malestar por lo que la próxima semana, además de paro habrá movilización.
El pedido de una recomposición del 45% fue rechazada por las empresas y hasta ahora no hay avances en la discusión salarial, por lo que desde ambas organizaciones sindicales consideran que los convenios de trabajo ya están vencidos.
En ese contexto, el Ministerio de Trabajo de la Nación decidió prorrogar la conciliación obligatoria dictada el día 30 de junio hasta el martes 3 de agosto (la misma venció el 22 de julio).
En consecuencia, ATSA ((Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina) y FATSA (Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina) manifestaron su enojo considerando que esta extensión de la conciliación es “injusta e ilegítima”.
“No es posible impedir la realización de medidas de fuerza cuya única finalidad es conseguir la actualización de los salarios básicos de todos los compañeros del Sector Asistencial cuando hace más de dos meses que nos encontramos negociando de buena fe y los empresarios se niegan a formular una propuesta” indicaron en un comunicado.
Asimismo, señalaron “la Resolución del Ministerio no hace más que dilatar la solución de un conflicto salarial” y advirtieron “vamos a seguir presionando y vamos a potenciar las medidas de acción sindical”, además de subrayar que “ninguna Resolución Administrativa va a detener la fuerza de los trabajadores que reclaman una justa recomposición de los salarios”.
Tal es así que redoblaron las medidas de fuerza que realizarán el próximo miércoles 4, donde no solo se habrá paro por 24 en todo el país, sino que además también convocaron a una movilización en la capital federal.
“Si peleamos contra la pandemia como no vamos a pelear contra la mezquindad de los empresarios” argumentaron y volvieron a exigir el 45% de incremento en los salarios básicos.