Finalmente no hubo acuerdo con las productoras de petróleo y el gobierno decidió imponer el anunciado congelamiento de combustibles mediante la ley de abastecimiento, el polémico instrumento al que solía recurrir el ex secretario de comercio kirchnerista Guillermo Moreno.
Las firmas se negaban a firmar un compromiso con mantener los precios, ya que aseguran que de este modo trabajarían a pérdida. Sucede que la secretaría de Energía a cargo de Lopetegui ideó un esquema para beneficiar a las refinadoras que establece un barril criollo de 59 dólares, pero a un tipo de cambio de $45,19.
De este modo, luego de descontarse las retenciones, los productores terminan recibiendo del refinador un barril a 42,8 dólares, cuando por ejemplo en Permian -yacimiento estrella de los Estados Unidos- cobran unos 57 dólares.
Es por eso que como revelaron fuentes periodísticas, le escribieron una carta a Lopetegui donde amenazan con recurrir a la justicia. "Para el caso que las medidas que se tomen vulneren los derechos. garantizados por la Constitución Nacional y la legislación vigente, las empresas abajo firmantes nos reservamos los derechos de acudir a las instancias administrativas y/o judiciales que consideremos pertinentes a los efectos de defender nuestros legítimos derechos", subrayaron en un escrito.
Ahora, tras conocerse la aplicación de la ley de abastecimiento, las petroleras confirmaron a este medio las medidas planteadas en la carta y alertan que "se frenará la producción".
Se trata de una sorprendente jugada por parte del oficialismo, que siempre abogó por mostrarse como la fuerza política garante del libre mercado. "Pensar que Lopetegui me chicaneaba en IDEA Neuquén preguntándome si nuestra propuesta para Vaca Muerta incluía llevarla a cabo en el sistema capitalista", respondió Guillermo Nielsen, uno de los economistas más cercanos a Alberto.
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