Los jujeños ni vemos las ganancias: récord de exportaciones del litio

El oro blanco, tal como le llaman al litio ha reportado un nuevo récord para la Argentina: en marzo su venta al exterior tuvo incremento del 27%, además de reportar ingresos por unos 91 millones de dólares, dinero que la ciudadanía jujeña ni siquiera ve pasar.

Las cifras fueron difundidas por la Secretaría de Minería de la Nación. El informe del organismo detalla tanto el crecimiento de la cantidad exportada del mineral, como de su cotización. Cabe mencionar que en el país sólo dos provincias poseen explotaciones de litio: Jujuy y Catamarca, con Olaroz-Cauchari y Fénix, respectivamente.

En relación a los montos que representaron las exportaciones, estas en marzo alcanzaron los 91 millones de dólares, es decir, un crecimiento interanual del 93%.

Asimismo, la Secretaría de Minería indicó que en primer trimestre de este 2023, las ventas del litio al exterior ascendieron a los 233 millones de dólares, lo que representa un crecimiento del 133% interanual.

Respecto a las cantidades, el litio representó sólo en marzo el 27% del total de las exportaciones mineras y fue el segundo mineral más exportado.

Además, si se compara la exportación marzo 2022- marzo 2023, el litio tuvo una suba de ventas del 3,5%, mientras que en lo que va del año ya registra un aumento del 22,9%.

La diferencia entre el crecimiento de entre los valores de la cotización y la cantidad de la exportación se debe principalmente al precio de referencia que dispuso el gobierno nacional el año pasado en 53 mil dólares la tonelada del mineral.

Así, con este boom por el litio, se espera que la Argentina -si continúa a este ritmo de producción- y poniendo a producir los 6 proyectos que están en construcción, aumente su capacidad de 200 mil toneladas en 2025.

Ante este panorama, la secretaria de Minería Fernanda Ávila destacó que “la minería permitirá diversificar la matriz productiva del país para no depender únicamente de un sector y así convertir a la actividad en un pilar de desarrollo”.

Este mismo argumento manifiesta Gerardo Morales en cada oportunidad, aunque los beneficios de la explotación litiera en Jujuy no llegan a la ciudadanía.

Son varias las sospechas que existen sobre la producción de Olaroz- Cauchari y el destino de sus fondos.

A principios de marzo, el economista y concejal por la capital jujeña, Gastón Remy apuntaba a la subfacturación de la producción del litio en la provincia: comparando los reportes financieros de empresas extractivistas con un informe del INDEC con los balances aportados por la sociedad estatal Sales de Jujuy, Remy apuntaba a que el consorcio de empresas (entre las cuales se encuentra JEMSE) no respetaba el valor de referencia dispuesto en 2022 para la tonelada de litio.

La diferencia entre el valor de la tonelada que reporta Sales de Jujuy con el precio de referencia dispuesto por el gobierno nacional alcanzaba los 14.177 dólares por tonelada de litio.

Otro de los puntos sobre los cuales el gobierno jujeño no brinda transparencia es sobre los contratos de concesión con las empresas explotadoras del mineral.

A pesar de la participación del Estado provincial en Sales de Jujuy (con el 8,5 con el JEMSE, otro 66,5 para la australiana Allkem y con el 25% la japonesa Toyota Tsusho Company), el gobierno de Morales se niega a aportar las condiciones de explotación.

La falta de transparencia fue cuestionada por ONG´s, que pidieron al Ejecutivo jujeño información sobre los contratos, pero no obtuvieron respuesta alguna.

Por otra parte, el gobierno de Catamarca -donde se encuentra Fénix- los contratos de concesión están publicados tanto en el Boletín Oficial de la provincia, como en el sitio de Diputados de allí.

La Corte Suprema de la Nación le puso un límite a este ocultamiento de información: ordenó al gobierno de Morales a entregar copia de todos los permisos de exploración y explotación de litio, todo ello, como consecuencia de una denuncia que realizaron las comunidades indígenas afectadas por el desarrollo que implica el uso intensivo del agua.

El fin es poder saber si la extracción del mineral afecta al medioambiente.

Dicha información deberá ser entregada a fines de abril.