Desde temprano se esperaba la llegada de Cristina Fernández en los tribunales de Comodoro Py para prestar declaración indagatoria en la causa que investiga supuestas irregularidades en la obra pública en Santa Cruz, conocida como “Vialidad”, y en la cual está acusada de liderar una asociación ilícita.
La polémica ya se había iniciado horas antes, cuando la defensa de la ex presidenta había pedido a la justicia que televisara el juicio iniciado contra la vice presidenta electa, pedido que fue negado por 2 de 3 magistrados.
Sobre este punto, apenas se sentó en el estrado, Cristina Fernández expresó “si alguien tenía la duda de la existencia del Lawfare, o no sabía de qué se trataba, la lectura que acaba de hacer el señor presidente de este tribunal donde se nos deniega transmitir en vivo y en directo esta audiencia, esto es una clase práctica del Lawfare en la Argentina llevado a cabo por este Tribunal”.
En medio de la discusión por esta negativa de la televisación, el canal de noticias Crónica TV transmitió alrededor de media hora de la declaración de la ex mandataria, aunque luego, por orden del juez Bonadío, obligó al medio a silenciar la transmisión de la declaración.
Aún así, se pudo escuchar como la vice presidenta electa hizo hincapié en el accionar de la justicia, y denunció persecución política.
Sobre ello dijo “esta causa que se conoce mediáticamente con el nombre de la causa de la corrupción de la obra pública tuvo una difusión mediática en vivo y en directa inédita”, a lo que agregó “tengo una suerte cuando sortean jueces... siempre me tocan Bonadío o Ercolini. La verdad es que deberíamos revisar un poquito cómo se desarrollan los sorteos en Comodoro Py”, manifestó.
“Todo lo que hacía el juez Ercolini era anticipado por los medios” subrayó en indicó “todo este proceso es lawfare, se publicitan cosas que no ocurrieron para conformar una opinión pública para que los jueces no tengan más que condenar. No soy abogada penal, pero nunca en mi vida escuché un guión en lugar de una acusación fiscal”.
Asimismo, sobre la acusación que le pesa, y en la que se habría perjudicado al Estado, la senadora subrayó sino no les parecía de trascendencia pública la transmisión. “No les parece importante la acusación que dicen que fui jefa de una asociación ilícita, en serio no les parece importante para transmitir”.
La declaración prosiguió con la relación entre el poder judicial y el gobierno de Cambiemos. “El gobierno que se va tenía una mesa judicial donde decidía todo. Hasta decidía quién iba preso, quién no iba preso, qué empresario había que apretar para sacarle la empresa. Todo este plan fue ideado para una feroz e inédita persecución”, esto, en clara alusión a los 2 jueces Pablo Bertuzzi y Leopoldo Bruglia, ambos designados por el Poder Ejecutivo a dedo, sin realizar concurso alguno.
“Un escándalo, una vergüenza, presionando jueces y fiscales, con reuniones públicas que después se publicaban. Yo que estoy acusada de ser jefa de una asociación ilícita, es decir de ser jefa de una banda, me llama la atención que jueces tan sensibles no hayan acusado ello. El Gobierno que se va tenía una mesa judicial que decidía quién iba preso o quién no, o empresarios", apuntó.
Ya más abocada a la acusación en su contra en este expediente, en tono irónico dijo: "Hay multiplicidad de acusaciones. Soy jefa de cuatro asociaciones ilícitas. La verdad no sé cómo tuve tiempo para gobernar, me la pasaba creando asociaciones ilícitas, dos familiares y dos con empresarios”.
Sobre la persecución, habló sobre las acusaciones que realizaron sobre su hija y su hijo. “Ni que hablar de la persecución de mis hijos. Mi hija, que fue fotografiada. Se la pasaron buscando la ruta del dinero K en Las Caimanes. El dinero de la sucesión, el de los plazos fijos que habíamos convertido en dólares no estaban en un paraíso fiscal, estaban a nombre de mi hija, una de las herederas, en un Banco Río, que es un banco nacional”.
Con frases altisonantes y con un gran cuestionamiento sobre el accionar de la justicia, su relación con el gobierno de Mauricio Macri y el rol de los medios de comunicación, la primera indagatoria de Cristina Fernández abrió la discusión sobre la persecución a dirigentes del kirchnerismo durante la gestión Cambiemos, pronto a finalizar.
Fuente: Crónica TV
Página 12
Clarín
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