Luego de meses y hasta años, familiares de víctimas de femicidios finalmente hallaron un poco de paz, al sentarse en el banquillo de acusados a los señalados por el asesinato de las hermanas Gorosito y de Camila Peñalva.
El martes de esta semana, el Tribunal en lo Criminal N°3 leyó la sentencia a Javier Broi, femicida de su ex pareja Pamela Gorosito y su hermana Ramona Gorosito. Tras declararse culpable, Broi fue condenado a prisión perpetua, por ser autor material y responsable de los de delitos “Homicidio calificado por el vínculo y por violencia de género; Homicidio calificado por odio de género; Lesiones leves en contexto de violencia de género y violación de domicilio, todo en concurso real”.
El juicio apenas duró una sola audiencia: al confesar el femicida, no fue necesario la presentación de pruebas y testimonios, tal como como quedó establecido en el Artículo 492 del Código Procesal Penal de la Provincia.
Así, a casi un año del hecho, el autor del doble femicidio en Yuto ya obtuvo condena. Resta saber si los oficiales de la comisaría 22 -que se negaron a tomar la denuncia de Pamela Gorosito el mismo día del asesinato- responderán ante la justicia por los delitos de “incumplimiento al deber de funcionario público”.
El hecho ocurrió el 15 de abril de 2022: Javier Broi estuvo ese día desde temprano merodeando la casa de Pamela, su ex pareja, con un cuchillo. Ante ello, la mujer se presentó ante la comisaría para pedir presencia policial. Broi ya tenía 6 denuncias por violencia de género.
El móvil nunca llegó.
Alrededor de las 22, Broi ataca a Pamela, quien se encontraba sola en la casa de su madre, Graciela Segundo. “Acompañé a mi otra hija (Ramona) a la casa de mi mamá en el barrio Jardín, con mis nietos, a unas cuadras de mi casa. De pronto escuchamos gritos en el barrio San Miguel. Me llamó mi vecina y me dijo que vuelva, que el papá de los chicos le estaba pegando a mi hija. Yo no podía correr y mi hija mayor con mi marido volvieron a la casa. Mi hija se cansó a mitad de camino y mi marido llegó y se dio con que ya la había matado”, relataba Graciela, quien también fue agredida por el femicida.
Tras el asesinato, Broi emprende la fuga. En el camino se cruza a Ramona Gorosito a quien le da un escopetazo causándole la muerte.
Fueron 7 los días en que Javier Broi estuvo prófugo, el femicida fue descubierto localidad salteña de Apolinario Saravia.
Una pericia falseada: el femicidio de Camila Peñalva
5 de marzo de 2020. Camila Peñalva, junto a sus hijos se encontraban en su casa en Huacalera. Alrededor de la 1 de la madrugada, Ángel Quipildor, ex pareja de Camila y padre de una de sus hijas, se presenta en el lugar.
Tras una discusión, Quipildor termina con la vida de Camila. según señaló la Fiscalía, el femicida le suministró un veneno y luego la asfixió.
Sin embargo, la muerte de Camila en un principio no fue considerado como femicidio, todo a raíz de una pericia que falseó Ricardo Alba, perito que en su informe sostenía que la mujer había fallecido por broncoaspiración por ebriedad.
Alba omitió los golpes que presentaba Camila, como así otros signos de violencia, como la presencia de un surco en el cuello compatible con un estrangulamiento.
Con sospechas de la familia de la víctima, se pidió una nueva autopsia.
La Fiscalía accede al pedido y el 23 de diciembre de 2021, una Junta Médica determinó que la muerte de Camila fue por estrangulamiento y no por broncoaspiración.
Casi 3 años después, Ángel Quipilodor deberá rendir cuentas a la justicia: este jueves comienza el juicio en el cual es señalado por los delitos de “Homicidio triplemente agravado por el vínculo, la utilización de veneno y de una mujer cuando el hecho sea perpetrado por un hombre y mediare violencia de género”.
Tanto como el caso de las hermanas Gorosito y el de Camila Peñalva, la violencia de género es uno de los agravantes. Problemática que en Jujuy sigue sin tener una política concreta.
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