En las últimas horas, la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) cortó el pago del Programa Hogar en toda la región de la Puna y la Quebrada, dejando sin la ayuda económica a sus beneficiarios para la compra de la llamada garrafa social.
El Programa Hogar consiste en la entrega de una ayuda económica para comprar garrafas, y se hacía efectivo para la adquisición de 2 ó 3 garrafas, de acuerdo a la temporada, sea invierno o no. Hasta el momento, para acceder a este beneficio, cada persona debía declarar un domicilio. Ahora, desde el ANSES, también se exige que ese domicilio declarado, tenga calle y número, de no cumplir con ese requisito, se deja de pagar automáticamente, sin derecho a reclamo alguno.
La polémica se genera porque, tanto en la puna como en la quebrada, son muy pocos los domicilios que poseen calle y número, excluyendo así, a la mayoría de un beneficio vital, en una zona donde las temperaturas bajas son extremas.
El programa, destinado a las personas que viven en zonas sin servicio de gas natural o que no se encuentren conectados a la red de distribución domiciliaria de gas, se pensó para que los sectores más vulnerables de la población pudiesen acceder a una garrafa para cocinar o calefaccionar, en un monto menor en comparación con otros puntos de venta.
Según indica la página de Anses, sólo podrán acceder a ese beneficio el grupo familiar que no supere los ingresos de 2 salarios mínimos. También podrán acceder aquellas familias donde en la vivienda resida una persona con certificado de discapacidad emitido por autoridad competente, y el mayor ingreso de los habitantes del domicilio no debe superar 3 salarios mínimos, vitales y móviles.