Desde hace varios años, el Concejo Deliberante delegó al municipio su facultad de otorgar aumentos en el valor del boleto del transporte público de pasajeros a partir de la implementación de una tabla polinómica, ello, permitió que las empresas sigan obteniendo recursos del Estado sin aportar detalles del uso de los subsidios, por lo que el concejal del FIT, Gastón Remy pidió a las compañías que brinden sus balances y concluyó que los incrementos del pasaje estuvieron por encima de la inflación, además de haber poca o nula inversión.
Valiéndose de una ordenanza municipal (6391/2012), el economista solicitó a las empresas El Urbano, Santa Ana, San Jorge, Xibi Xibi-Colón y Unión Bus los estados contables de los últimos 5 años, número de personal y tareas que realizan por empresa, además de detallar el parque automotor, identificación de cada vehículo, antigüedad, certificado de aptitud técnica de cada unidad, por empresa.
La respuesta de las compañías no fue satisfactoria: apenas presentaron balances de algunos años, pero no brindaron información del resto de los puntos solicitados.
A pesar de ello, Remy analizó los balances contables y obtuvo varias conclusiones que fueron presentadas ayer, en una conferencia de prensa.
“El servicio público de transporte urbano de pasajeros tal como funciona en la actualidad, concesionado al sector privado y con subsidios, les permite a las empresas obtener ganancias y mejorar sus patrimonios netos”.
El concejal expuso que el total de ingresos de las cinco empresas está compuesto en un 50% por la venta de boletos y el otro 50% por subsidios nacionales (mayoritarios), provinciales y municipales.
Ello le permite a las compañías registrar ganancias operativas, en tanto con los montos de los subsidios “cubren el 100% de los salarios, quedando incluso un excedente de subsidios aplicados a otros rubros de los gastos”.
Sobre ello, Remy indicó que “los conflictos permanentes por la falta de pago en tiempo y forma de salarios y los acuerdos paritarios, encuentra a las empresas aduciendo el no ingreso a tiempo de los subsidios, intentando de esta forma naturalizar que sea el Estado el que pague los salarios, cuando se trata de una empresa privada.”
Se suma a esto, que dichas ganancias obtenidas no se traducen en mejoras del servicio, tanto en frecuencia como estado de las unidades. “En los balances presentados prácticamente no se registran inversiones. De las cinco empresas, solo “Xibi Xibi” y “El Urbano” invirtieron en 2018, 2019 y 2020 en forma discontinuada. Las inversiones apenas representan el 24 % de las ganancias brutas de 2019. Se desconoce el destino del resto de las ganancias.”
Asimismo, el economista destacó la necesidad de una “reorganización urgente” del servicio de transporte y municipalizarlo bajo la administración de trabajadores y usuarios.
Ello se desprende que el Ejecutivo benefició a las empresas con incrementos del boleto por encima de la inflación: entre diciembre de 2020 y diciembre de 2021, el valor del pasaje subió un 88%, mientras que la inflación en ese periodo fue del 51%.
Y agregó el informe que, durante este 2022, el primer aumento del boleto fue de 19% y restan dos incrementos.
”El sistema público de transporte urbano de pasajeros bajo el actual régimen de concesión facilita un negocio formidable para los empresarios que pueden obtener ingresos por medio de la venta de boletos, actualizados tres veces al año según la inflación, subsidios que cubren al menos los salarios, y hacerse de ganancias que no son reinvertidas prácticamente en el servicio. Provocando su vaciamiento dado el deterioro de las unidades con el uso y el paso del tiempo, además de las limitaciones para mejorar frecuencias y ampliar los recorridos. Vale destacar que los empresarios pueden acceder a este negocio único con la ayuda del Estado y los distintos gobiernos de turno a nivel nacional, provincial y municipal que garantizan que el servicio público sea concesionado a manos privadas.”