Caída de la desocupación del 50% en tres meses, el dato mentiroso del gobierno jujeño

Recientemente, el sitio gubernamental Prensa Jujuy lanzó una publicación sobre el desempleo en la provincia y con dato que parece alentador: en tres meses la desocupación cayó un 50%. La realidad es que no es que hay más empleo, sino que las personas ya no buscan trabajo.

En principio, los números que tomó el Ejecutivo se corresponden al informe del Mercado Laboral que se incluye en la EPH -Encuesta Permanente de Hogares- que elabora periódicamente el INDEC. Según señala el documento, en el segundo trimestre de 2024, el conglomerado Jujuy-Palpalá registró una desocupación del 4%. En tanto que el promedio nacional es 7,6%.

Es precisamente sobre estos números que el gobierno celebra como un triunfo la política de “transformación de la matriz económica y productiva”. La comparación con los resultados del primer trimestre del 2024 da como nivel de desocupación un 8,1% en conglomerado Jujuy-Palpalá y de allí el logro de haber reducido en un 50% la desocupación.

Litio, energías renovables, cannabis medicinal, zona franca en Perico y La Quiaca, minería, turismo, tren solar, el Cabildo Histórico y la conectividad aérea entre Jujuy y Paraguay, son algunos de los “hitos” que apuntó el gobierno de Sadir sobre la reactivación económica de la provincia, además de señalar sobre la obra pública vial, de viviendas y locales comerciales, además de escuelas.

Como es sabido, la industria litiera no ocupa demasiada mano de obra, lo mismo ocurre con el mantenimiento de la planta fotovoltaica de Cauchari; el tren solar (que en realidad usa energía eléctrica) no tiene la cantidad de pasajeros esperados, la zona franca de La Quiaca no está en funcionamiento, la conexión área con Paraguay es reciente y la obra pública está paralizada (ejemplo de ello es la represión que sufrieron trabajadores de la construcción la semana pasada en Libertador General San Martín que hace 9 meses están desocupados).

Tal es así, que los números que celebra el Ejecutivo es un dato mentiroso.

“La desocupación fue de 4%. Pero… el deterioro del mercado laboral es fuerte. Ocupados y subocupados que buscan otro empleo 28,1% (2do más alto del país) y 8,6% subocupados, respectivamente. Junto a desocupados suman un 40,1% de trabajadores con problemas de empleo”, explicó el economista Gastón Remy.

El dirigente de la izquierda refirió sobre el informe del mercado laboral de la EPH y señaló “crece la actividad 4,7% y el empleo 6,5%, o sea, más personas entraran a trabajar porque con bajos salarios y alta inflación, ese grupo familiar no llega a fin de mes.  El salario privado en Jujuy en promedio no cubre la línea de pobreza. Estatales más abajo aún”.

Y agrega “en este marco, suena lógico, que el desempleo baje dado el efecto “desaliento”, trabajadores que dejan de buscar y se la rebuscan con changas. Vean el dato de subocupados, este crece y llega al 10,6%” y concluye “hay deterioro fuerte del mercado laboral por falta de demanda de empleo (público/privado), bajos salarios que presionan a que se trabaje más y se busque más empleo, lo cual, es una olla a presión para el desaliento de búsqueda. Difícilmente mejore en los próximos meses”.

Lo que señala el diputado del FIT es determinante en la lectura de los datos: la desocupación se mide entre las personas de la PEA -Población Económicamente Activa- que busca trabajo. El rango etario va entre mayores de 10 años a 65. Todo el universo de personas que están dentro de esa edad no necesariamente trabaja o buscan trabajo, por lo que se considera “inactiva”.

Es precisamente esto, lo que cambian los números de desempleo: en un país y una provincia donde no hay oferta laboral o los salarios son bajos, las personas dejan de buscar trabajo y eso es lo que Remy señala como efecto “desaliento”. Las ferias barriales son un claro exponente de como los jujeños y jujeñas intentan rebuscarse otras formas de generar ingresos para sus familias.