La inflación y la canasta básica total son los dos datos sobre los cuales sindicatos de Jujuy se aferran para exigir incrementos salariales que, en lo que va del año, ya apuntan a una pérdida de más del 100%, por lo que pidieron al gobierno de Sadir que reabra la mesa de negociación.
Fue a través de una nota de la Intergremial que dirigentes señalaron la difícil situación económica que atraviesan trabajadores, por lo que septiembre también debe implementarse una recomposición salarial y apuntaron que siendo la inflación “como base de cálculo de incrementos de este 2024, que igualmente deja a trabajadores en salarios bajo el valor de la canasta, es decir, en la pobreza cuando no, la indigencia”.
De hecho, el costo de la canasta básica total -valuada en 896.565 pesos en agosto para una familia de cinco integrantes, según detalla el informe técnico de la DIPEC que vio a conocer este lunes- es el piso salarial que pretenden sindicatos.
En ese sentido, la nota que dejaron en Casa de Gobierno cuestiona que el Ejecutivo solo tome como variable de recomposición salarial la inflación, puesto que “INDEC y DIPEC maquillan excesivamente una desaceleración de la inflación y se pretende poner coto a la discusión paritaria. Por ello, requerimos urgente discusión genuina y técnica de los guarismos y la implementación de una política salarial de recupero del deterioro de 2023, verdadera equiparación de la inflación de 2024 y que marque la Canasta Básica Total como salario mínimo o piso salarial”.
Que el reclamo de los gremios vuelva a tomar a diciembre como eje de la discusión se debe a dos cosas, la primera, la devaluación del 118% del peso argentino: el dólar -oficial- cotizaba en 376 pesos, a los pocos días de haber asumido Javier Milei la presidencia, su ministro de Economía, Luis Caputo, puso como valor del dólar a $805,45. En segundo lugar, en el último mes del año, la inflación trepó al 25,5%.
Así, la primera negociación salarial en Jujuy, que se concretó en febrero, no tuvo concordancia con esta fenomenal pérdida de poder adquisitivo de la ciudadanía por la devaluación, ni tampoco la aceleración de los precios. La única medida que tomó Sadir, en su nuevo rol de gobernador, fue la de unificar el pago de dos cuotas del bono de fin de año a estatales, el mismo ascendía a 100 mil pesos y se liquidarían en diciembre, enero y febrero.