El pasado miércoles la ministra de Educación Isolda Calsina se acercó a la sede del IES N°2 de Humahuaca, luego que la comunidad educativa de ese instituto realizara un abrazo simbólico al edificio por el cierre de carreras.
En aquella oportunidad, Calsina decidió realizar el encuentro a puertas cerradas, mientras que estudiantes exigían que fuera en asamblea para que pudieran participar todas las personas interesadas. En forma de protesta, el estudiantado coreó distintos cánticos, pero no pasó de eso.
Sin embargo, Calsina publicó en sus redes sociales, un mensaje haciendo alusión a ese encuentro, y, denunció haber recibido “amenazas y maltrato por un minúsculo grupo violento”.
La publicación, en la cual también expresó “seguimos construyendo futuro para estudiantes” fue acompañado por las frases #MasEducacionDeCalidad “#TenemosGobierno #TenemosFuturo.
Estas publicaciones de la ministra detonaron el enojo de docentes, que hicieron un descargo en un comunicado.
A continuación, el texto completo
Sobre pedagogías posibles
La importancia de fomentar la elaboración de preguntas,
De favorecer la comprensión reflexiva de la realidad social, política y económica a partir del abordaje de distintos saberes,
De respetar y favorecer la autonomía de lxs estudiantes,
De respetar y considerar los saberes de lxs estudiantes,
De sostener coherencia entre lo que se dice y hace,
De saber escuchar,
De responder con experticia, generosidad, empatía,
De propiciar transformaciones a partir de la acción reflexiva...
Todos son principios que lxs trabajadorxs de la educación de distintos niveles y modalidades conocemos bien. Forman parte de nuestras prácticas cotidianas, de nuestro lenguaje común, de nuestros esfuerzos. Este código común que lxs docentes reconocemos propio se constituye en un lenguaje incomprensible para la Sra. Ministra de Educación que acude a repetir automáticamente la mutilación que decidió realizar al sistema formador de la provincia.
Su comentario provocador, es una evidencia de la pedagogía del cinismo que la sra practica. Para la funcionaria no docente que está al frente de la cartera educativa, lo importante es haber recibido supuestos mensajes de apoyo de estudiantes del IES 2 ante las supuestas amenazas y maltratos sufridos. Se entiende que para cualquier persona, recibir mensajes de apoyo es algo que gratifica. Si no se tratara de la Ministra de Educación, cuyas políticas para la formación docente están provocando una profunda crisis, podría generar empatía. Pero la crisis que la funcionaria genera, vulnera los derechos de estudiantes ensañándose con lxs del interior de la provincia, por lo que victimizarse no es la respuesta necesaria que la situación amerita.
Dice de supuestas amenazas recibidas... Es el lenguaje que usa y practica con los IES a los cuáles plantea que si no actualizan los diseños, si no cierran divisiones, no se abren las carreras.
Dice de violencia y no titubea en cerrar las únicas posibilidades de formación existentes para lxs estudiantes del interior de la provincia.
Dice que lxs que quieran estudiar en la capital podrán contar con el BEGU ! como si esa fuera una opción aceptable para alguien que tiene que afrontar el desarraigo en el contexto de una crisis económica para concretar sus sueños.
Dice de violencia y la propuesta en su mensaje es estigmatizar a estudiantes y docentes que asumen su derecho a la educación y al trabajo y que interpelan en la dinámica de la democracia a su funcionaria pública esperando ser escuchados y que sólo encontraron un muro colosal de indiferencia.
Los abrazos a los establecimientos, las clases públicas, las marchas, las asambleas son evidencias de una pedagogía que defiende la educación pública, la igualdad de posibilidades de elegir qué estudiar, que exige una política educativa que tome decisiones con criterios solventes, científicos, no en base a prejuicios y dogmatismos neoliberales.
Mientras este Misterio de Educación sigue construyendo ese futuro sin posibilidades para nuestrxs jóvenes, lxs estudiantes y docentes construyen este presente de lucha en defensa de la educación pública.
Corriente Marina Vilte