En el día de ayer, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) realizó el Congreso Provincial Ordinario y Extraordinario para definir temas respecto a las elecciones del gremio del 7 de agosto.
Ante la ausencia del Secretario General, Matías Brizuela, se intentó suspender el congreso, por lo cual, se cerró la sede, ubicada en la ciudad de Palpalá. Sin embargo, el encuentro se llevó a cabo igual porque el estatuto gremial estima que también lo puede ser presidido por el Secretario Adjunto, en este caso Carlos Alberto Mercado, quien se hizo presente en el lugar.
Pese al cierre de la sede gremial, no se pudo impedir que se lleve a cabo el congreso.
Según detalló Fernando Acosta, quien disputará la conducción del gremio en las próximas elecciones, el congreso cumplió con todos los requisitos: hubo cumplimiento de quórum, que pudo ser acreditado por una escribana presente, quien confirmó la presencia de los congresales.
Además, explicó el dirigente que no se aprobó la memoria y balance (porque no presentaron) y se eligió Junta Electoral para las elecciones del 7 de agosto.
Respecto a lo sucedido, Acosta expresó “nuevamente quebramos el intento de evitar el debate de los afiliados, mostramos que somos mayoría quienes queremos un ATE participativo, democrático y de pie para defender el derecho de los trabajadores que lucha contra las políticas de hambre y explotación de estos gobiernos de Macri y Morales”.
También aclaró, que el Congreso Extraordinario, una vez constituido, pasó a cuarto intermedio por la lluvia y que todavía no tiene fecha. Serán las autoridades del congreso quien deban definir cuando se volverán a reunirse, y así discutir sobre las políticas que llevará el gremio, un plan de lucha, entre otros temas.
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