Parece que el gobierno de Gerardo Morales seguirá negando el problema del hambre que atraviesa la provincia, y de la mano de sus legisladores, hicieron que se cayera la sesión especial, convocada para las 10 de la mañana en la Legislatura, para tratar la emergencia alimentaria.
A diferencia de cuando los proyectos de ley vienen del ejecutivo, donde el bloque de la UCR y de Primero Jujuy, partido que conduce el vice gobernador Carlos Haquim, donde asisten rigurosamente y levantan su mano, aunque sea para endeudar de manera exorbitante, hoy, los legisladores oficialistas ni siquiera se asomaron a las inmediaciones de la Casa de Piedra.
Quienes si estuvieron presentes, fueron las organizaciones sociales que mantienen su compromiso con los sectores de menores recursos, brindándoles una copa de leche o un plato de comida.
De esta manera, el gobierno se mantiene inmutable en su posición de no discutir la situación de hambre que padece la provincia, y condena a comedores y merenderos a seguir percibiendo 6,85 pesos por persona asistida.
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