“En Jujuy es normal a quien no se disciplina y no obedece las órdenes de Lello Sánchez se lo persigue”

Desde que asumió Gerardo Morales la gobernación en 2015, manifestarse en Jujuy implica la apertura de causas contravencionales y penales, la víctima puede ser cualquiera, desde quien reclama por comida, integrantes de comunidades indígenas y hasta dirigentes, como lo es el caso de Mariana Vargas, quien desde hace 6 meses está siendo investigada por la compra de elementos robados, algo que sería normal, pero el escenario completo es otro: entregado lo robado y aportando pruebas, la justicia nunca investigó a quien cometió el robo, por lo que la abogada explica que esto no es más que otra maniobra del Ejecutivo para perseguir a sus opositores.

“Estas cosas le hacen mucho daño a la justicia, nosotras somos parte de un movimiento de mujeres y disidencias que venimos luchando por condenas a femicidas, que se condenen los crímenes contra mujeres, logramos muchas de esas condenas y de repente nos pasan estas cosas, donde todo es armado, todo es falso, por lo tanto se genera un gran descreimiento y es problema de esto que es también utilizado por esas personas que son perseguidas justamente”, comenzó referenciando Vargas en diálogo con Radio 2 respecto a la investigación que lleva a cabo el fiscal Walter Rondón, del cuestionado MPA.

En ese punto, la abogada e integrante de la Multisectorial de Mujeres y Disidencias de Jujuy diferenció “están los que son perseguidos justamente y que el movimiento de mujeres quiere perseguir y el pueblo también, en relación a los que ordenaron la represión de junio, etc., estamos los otros, en estas causas donde, para disciplinarnos, se nos criminaliza por cuestiones que no deben criminalizarse”.

Frente a esta persecución, Vargas consideró que desde la justicia “se equivocan haciendo esto, hacen realmente mucho daño y, en definitiva, me lo hacen a mí que puedo hablar yo, puede hablar el movimiento de mujeres, pero hay otros que no pueden hablar, porque implica que puede que los echen de los trabajos, del MPA, que se les haga jury si son jueces o juezas, pero esta es la realidad, en Jujuy es normal, natural y sistemático que a quien no se disciplina y no obedece las órdenes de Lello Sánchez se lo persigue, se le arman causas, se lo criminaliza y tal vez se lo condene”.

Los cuestionamientos de la letrada se fundan en que cada vez que se aproxima una actividad o se expresa sobre ciertas cuestiones, inmediatamente es citada a audiencias, recientemente fue convocada por un programa de televisión local donde apuntó sobre el armado de causas, por la cual fue convocada a declarar en calidad de testigo “en un acto claramente de intimidación, supongo que también ordenado por Lello Sánchez, se me citó como testigo, por lo tanto no había problema, por haber dicho que se armaban causas, se armó una causa de oficio de por qué dije lo que dije, me hicieron declarar bajo juramento”.

Y agregó “es absurdo, si quieren intimidarnos de esta forma, es absurdo, ya hemos aprendido que el camino de lo colectivo es donde nos salvamos todos y todas y que lo individual o estas situaciones de disciplinamiento individual, donde la persona se guarda, se llama a silencio no es el camino que elegimos nosotros, por lo tanto, como dicen las chicas, cuando nos tocan a una nos tocan a todas y la respuesta siempre va a ser colectiva”.

En un pedido por respetar la división de poderes, Mariana Vargas manifestó “frenen, Lello Sánchez habla de paz social, pero no hay paz social si nos persiguen injustamente si nos criminalizan, no va a haber paz social, no se la vamos a dar y no vamos a conceder nuestro silencio bajo ningún punto”.

Y recordó “nuestro movimiento de mujeres ha aprendido y se ha forjado con muchas luchas, con muchas conquistas, algunas derrotas, pero incluso en las derrotas hemos podido avanzar, hemos podido ganar y hemos salido airosas para después lograr nuevos triunfos y hablo específicamente de Romina Tejerina y la condena que fue visto desde un punto de la derrota, pero logramos que no sea una prisión perpetua”.

Por último, Vargas advirtió “incluso en el peor escenario lo que van a tener es un avance del movimiento de mujeres que va a luchar por las libertades democráticas, porque la lucha de las mujeres es una lucha por los derechos humanos de las mujeres”.