La policía esperó todo el fin de semana para buscar a Iara Rueda, cuando debía hacerlo inmediatamente según protocolo

“Hicimos la denuncia el 23, les dije busquen en el celular ¿y qué te dicen? es fin de semana, el informe recién nos va a llegar el lunes” esa fue la respuesta que obtuvo la madre de Iara Rueda, menor asesinada en Palpalá cuando se presentó en la comisaria para que inicien la búsqueda que debió ser inmediata, según indica el protocolo.

Es que en 2017, el ministro de Seguridad, creó el Protocolo General para la Búsqueda de Personas Desaparecidas o Extraviadas (Resolución N°51-MS) en la cual se establece que no existe un tiempo mínimo para tomar las denuncias como así tampoco para comenzar con las acciones de búsqueda.

Para ello, también se indica que tras la desaparición o extravío de una persona, la denuncia deberá contener la mayor cantidad de datos posibles que faciliten la búsqueda.

Entre esta información se destaca los datos personales (nombre, apellido, edad, lugar de nacimiento, número de celular, ocupación, entre otros), como así también hechos o circunstancias posibles como cuándo fue la última vez que fue vista esa persona, si ya se había ausentado con anterioridad o si había manifestado la decisión de dejar el hogar.

Sobre este punto, fue la madre de Iara quien apuntó que todos esos datos ya habían sido aportados, incluso, ese mismo día de la desaparición (23 de septiembre) hizo varias publicaciones en redes sociales para dar con el paradero de su hija.

“El mismo día que desapareció mi hija publiqué en redes sociales, no perdí tiempo porque yo conozco a mi hija, mi hija es incapaz de escaparse, yo ese día le dije a los policías búsquenla, a lo que respondieron estamos en eso”.

A eso, le agregó que había sido vista en los alrededores donde fue hallado el cuerpo de Iara, su bicicleta. Oportunidad en que también detalló que sólo faltaba el celular y una carpeta de su hija, pidiendo que se realice la búsqueda teniendo en cuenta la ubicación del teléfono móvil a través del GPS, lo cual no se hizo.

También se suma, que un sereno vio una chica correr y que la seguía un auto.” Le avisamos, pero la policía no prestó atención a este detalle” relató el padre de la menor asesinada.

A esto suma, que el protocolo también establece prioridades de búsqueda, considerándose de alto riesgo cuando se trata de menores de edad, por lo cual, los operativos para localizar a Iara debieron iniciarse en el mismo momento de la denuncia, es decir, el mismo día miércoles. Pese a ello, la policía recién inició el rastrillaje 6 días después, horas que pudieron haber sido cruciales para que el desenlace fuera otro.

“Son incompetentes, tanta burocracia para una cosa, para otra y ahora no está mi hija quién me la devuelve” lamentó la madre de Iara.

A los cuestionamientos sobre el accionar de la policía por demorar 6 días en iniciar la búsqueda, se debe incorporar otro detalle: el corte de electricidad en el barrio que afectó el funcionamiento de las cámaras de seguridad.

“Da la casualidad que cuando mi hija se desapareció no había luz supuestamente y las cámaras se apagaron, qué casualidad y de la otra chica que desapareció, qué casualidad que también se cortaron las cámaras” espetó la madre de Iara, quien desde ayer debe llorar la pérdida de su hija ante un Estado ausente.