Ayer, en horas de la tarde, se levantó el castigo impuesto a Graciela López, integrante de la organización social Tupac Amaru, quien estaba recluida en una celda de castigo por haber respondido a malos tratos ejercidos por las guardiacárceles.
Fue el Comité por la Libertad de Milagro Sala y los presos políticos de Jujuy y ANDHES (Abogados y Abogadas del Noroeste Argentino en Derechos Humanos y Estudios Sociales) quienes dieron a conocer la suspensión del confinamiento de López.
En un comunicado, ambos organismos expresaron “esta vez pudimos hacer cesar rápidamente los excesos cometidos hacia las compañeras presas políticas, pero nos mantenemos en alerta para que los mismos no se sigan repitiendo”.
Asimismo, en el documento aclararon que siguen “denunciando que en el Penal de Mujeres de Alto Comedero- Unidad III existen celdas de castigo, que implican un severo régimen de aislamiento a las que denominan celda de contención”.
Además, agregaron que “el régimen disciplinario que allí se aplica, resulta violatorio de garantías constitucionales básicas como el derecho a la defensa, ya que primero se impone el castigo y después se comunican los motivos de la sanción sin que las castigadas puedan ser escuchadas en su defensa”
En la misma dirección, consideraron “esos castigos implican exponer a las mujeres a condiciones que exceden el disciplinamiento que implica un régimen carcelario. Por cuanto son expuestas a situaciones que agravan su condición poniendo en riesgo su salud y su integridad. Situaciones todas ellas reñidas con la normativa protectoria de derechos humanos al que adhiere nuestro Estado y que ningún funcionario, sea del poder ejecutivo o judicial debería desconocer”.
Frente a esta situación, tanto el Comité por la Libertad de Milagro Sala y los presos políticos de Jujuy y ANDHES, enumeraron varios puntos sobre los que exigieron pronta respuesta. Entre ellos, la eliminación de forma inmediata las celdas de castigo conocidas como “chancho” y la resolución de las solicitudes de prisión domiciliaria de Patricia Cabana y Graciela López.