Mientras que personal de salud concreta medidas de fuerza por la falta de una recomposición salarial acorde a los tiempos de la economía del país, el Ministerio de Salud de la provincia nuevamente impone nuevas condiciones laborales que lo único que apunta a generar mayor malestar entre sus trabajadores: desde ahora, se impondrá una evaluación trimestral a todos los trabajadores del sector.
Fue mediante la resolución 836 que firmó el pasado 28 de febrero el ministro Gustavo Bouhid que se aplicará una “Grilla de evaluación permanente para el personal de salud”, la cual, evaluará 3 áreas de cada agente sanitario: la calidad de su desempeño laboral (productividad, cuidado de equipos y materiales), sus antecedentes (asistencia, puntualidad, antecedentes y sanciones, capacitaciones) y su relación con demás trabajadores y equipos de salud (relacionado a lo actitudinal y al trabajo en equipo).
Según señala la normativa, dicha grilla se desarrolló a pedido de la Dirección Provincial de Capital Humano “para cumplir los objetivos del Plan Provincial de fortalecimiento, distribución e incorporación del recurso humano en salud y que apunta a mejorar el desempeño laboral”. Dicho plan fue aprobado el año pasado (resolución 1322, tal como detalla la nueva resolución), donde se pone de relevancia la escasez de recursos humanos, algo que desde sindicatos vienen denunciando hace años, ante la falta de nombramientos en el área, es decir, por decisión del mismo Ministerio de Salud, afectando así la atención a la población.
A pesar de ello, la cartera que maneja Bouhid señala que la grilla será la que permita “arbitrar las medidas” para “direccionar el desempeño de los agentes hacia el logro de los objetivos institucionales, así como la red en su conjunto”, sacando de foco la desinversión que aplica el gobierno de la provincia (desde la gestión de Gerardo Morales) en el sector.
La evaluación tendrá como objetivo “medir el potencial del RRHH para impulsar su pleno empleo; maximizar la productividad del RRHH, mejorando la eficiencia y eficacia en la prestación de los servicios a la población; dar oportunidades de crecimiento, estímulo, reflexión al personal que se desempeñe en las distintas UDO”, enumera el documento.
En cuanto al proceso de evaluación en sí mismo, se llevarán a cabo trimestralmente, siendo los meses de marzo, junio, septiembre y diciembre los meses en los cuales se concretará. Asimismo, habrá una Comisión Evaluadora que será constituida por el jefe inmediato del agente evaluado, el jefe ser servicio o departamento, al director asistencial y al director administrativo, más la participación de un delegado gremial, que oficiará solamente de veedor.
Según el puntaje, el desempeño puede ser satisfactorio o insatisfactorio. De superar un resultado con igual o superior al 72% de los factores evaluados, se considerará al personal como “competente”, con una evaluación inferior a este 72%, se cataloga a trabajadores con un desempeño “insuficiente”, por lo que se indica que dicho agente “debe mejorar en un plazo breve”. En el caso de ser “deficiente”, se considera que es “imperativo el mejoramiento de su desempeño”.
Si bien la resolución indica que un/a agente que obtenga una evaluación “no satisfactoria” podrá solicitar una revisión por la puntuación obtenida, la cual estará a cargo de la Dirección Provincial de Capital Humano, lo que no aclara, si este puntaje podrá ser motivo de desvinculación.
Por otra parte, dicha evaluación dependerá sobre las metas que se impone a cada trabajador/a. A modo de ejemplo, la resolución detalla como objetivos a cumplir “ordenar y actualizar al 100%, en x tiempo la carga de ODAS en el sistema MÁS SALUD, atender en x tiempo x demandas espontáneas, realizar visita sanitaria a x cantidad de viviendas en x tiempo”, entre otras actividades. Esto podría llegar a configurar una sobrecarga de tareas.