Organismos de derechos humanos de Jujuy convocaron para este viernes una marcha en conmemoración de la detención y desaparición de diez estudiantes secundarios de la ciudad de La Plata, hecho ocurrido hace 47 años.
La convocatoria está prevista para las 18 en Plaza Belgrano, lugar desde donde partirá la columna de manifestantes, a quienes desde la comisión organizadora pidieron que vayan con guardapolvos en defensa de la educación pública.
En esa misma dirección, dentro de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la UNJu a partir de las 20.30 se concretará un festival en defensa de la educación pública, gratuita y de calidad.
En ambos casos, el señalamiento de resguardar la educación pública es una respuesta a la propuesta política del ultraderechista Javier Milei, quien propone un sistema de arancelamiento de la educación a través de “váuchers”.
Así, la movilización retoma la lucha estudiantil de los ´70.
La noche de los lápices una hoja más de la historia de tortura, secuestro y desaparición que aplicó la dictadura cívico-eclesiástico y militar en la Argentina. El hecho se remite a lo ocurrido en la noche del 16 de septiembre de 1976 y días sucesivos, cuando un grupo de tareas de la Policía de provincia de Buenos Aires secuestra a 10 estudiantes de la secundaria que militaban en la UES (Unión de Estudiantes y la Juventud Guevarista en la ciudad de La Plata.
Según la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (CONADEP), “los adolescentes secuestrados habrían sido eliminados después de padecer tormentos en distintos centros clandestinos de detención, entre los que se encontraban: Arana, Pozo de Banfield, Pozo de Quilmes, Jefatura de Policía de la Provincia de Buenos Aires y las Comisarías 5ª, 8ª y 9ª de La Plata y 3ª de Valentín Alsina, en Lanús, y el Polígono de Tiro de la Jefatura de la Provincia de Buenos Aires”.
Entre ellos estaban: Francisco López Muntaner, María Claudia Falcone, Claudio de Acha, Horacio Ángel Ungaro, Daniel Alberto Racero, María Clara Ciocchini, Pablo Díaz, Patricia Miranda, Gustavo Calotti y Emilce Moler. Cuatro de ellos sobrevivieron. Se presume que los restantes fueron fusilados en los primeros días del año 1977.