Oficina Anticorrupción: cambiar algo para que nada cambie

Se terminó el ciclo de Joaquín Millón Quintana frente a la Oficina Anticorrupción de la provincia y hoy asumirá su remplazo, Josefa Herrera, en medio de una polémica, dado que la mujer pertenece al riñón del radicalismo, e incluso, fue funcionaria durante el primer mandato de Gerardo Morales.

La designación de Herrera como fiscal titular también suma otro problema: es que tal como establece la ley donde se creó la OA, su nombramiento debe ser refrendado en la Legislatura, cosa que no ocurrió, por lo cual, Morales impuso nuevamente su voluntad por sobre las normas.

Así, lejos de cumplir con su misión de velar por la transparencia en la gestión pública, la OA parece cubrir las espaldas de los funcionarios del gobierno provincial más que controlarlos. Un claro ejemplo de ello, es el caso de Facundo Morales, hijo del gobernador, donde mintió en su declaración jurada, documento que debe presentar en dicho organismo.

Es que Facundo Morales fue designado por su padre como Coordinador del Ente Autárquico del Festival de Cine de las Alturas en Jujuy, pero al mismo tiempo cobra un sueldo en la Defensoría del Pueblo de la Nación en la Ciudad de Buenos Aires, cargo que es incompatible con el provincial, y que difícilmente pueda ejercer ya que debería cumplir funciones para el primero en San Salvador de Jujuy.

En tanto, en su DDJJ presentada ante la OA, el hijo del gobernador detalló que su trabajo en la oficina del Defensor del Pueblo de la Nación concluyó el 31 de enero de 2018 y que comenzó a ejercer su cargo como Coordinador del Ente Autárquico del Festival de Cine de las Alturas en Jujuy el 2 de febrero del mismo año. Sin embargo, esa relación laboral con el Defensor del Pueblo de la Nación no está extinguida, por lo cual, sigue percibiendo una remuneración de la Defensoría.

Con cambios pero sin modificaciones

La salida de Joaquín Millón Quintana, no implica necesariamente que cambiarán las cosas en la OA, que por el momento quedó a cargo del fiscal adjunto, Juan Manuel Soler.

Josefa Herrera, quien fuera Procuradora General durante el primer mandato de Morales, pertenece al radicalismo, incluso, participó de la campaña electoral de Gerardo Morales en 2015. Por aquel entonces, Herrera estaba a cargo de la Secretaría de la Mujer de la UCR.

Así, la nueva fiscal titular repite lo que ya había ocurrido con su antecesor: ser parte del oficialismo, pese a que ese cargo debía estar en manos de la oposición.

Recordemos, que Millón Quintana, además de incumplir con 2 de los 3 requisitos para asumir el cargo de fiscal de la OA (residir por lo menos 2 años en Jujuy, entre otros), se lo sindicó como perteneciente a una familia aristocrática de la provincia con lazos con el radicalismo.

De esta manera, Morales, nuevamente traspasa los límites que las propias leyes le imponen, en un contexto, donde el país observa con recelo la falta de independencia de los poderes tras los dichos de sus propios funcionarios judiciales.