Los despidos injustificados en los municipios se replican en diferentes localidades, son repudiables porque usan a los trabajadores como premio electoral. No debe naturalizarse ese juego de los políticos que ganan. El caso más raro y de profundas diferencias es lo que sucede en el municipio de Santa Clara.
Municipio de bandera oficialista, y que el 10 de diciembre tras la asunción del radical Antonio Alaniz como intendente despidió sin motivo a 70 trabajadores, varios tienen entre 7 y 15 años de antigüedad.
Los trabajadores despedidos llegaron el lunes a la capital en una caminata para visibilizar el conflicto laboral y salarial, ya que no cobran hace 2 meses; pero sí cobraron el bono. El gremio de Sindicato Jujeño de Empleados Municipales y provinciales (SIJEMPRO) los tiene de afiliados y es conducido por Emilio Cayo, y no se cumplen los acuerdos entre las partes.
Cayo, dirigente de la ODIJ que supo integrar la Red de Organizaciones sociales, empresario de boliches, diputado provincial (MC), hoy es referente de SIJEMPRO y es cuestionado por 70 trabajadores que han sido despedidos por Alaniz desconociendo ordenanzas.
Los trabajadores municipales despedidos realizan una permanencia desde el lunes en Plaza Belgrano, Secretaria de Trabajo y en el gremio de SIJEMPRO para visibilizar un conflicto con la nueva gestión radical en el municipio.
Soledad Villafañe, trabajadora municipal relato que “el 10/12 el secretario de gobierno del municipio de Santa Clara, nos señaló con el dedo diciendo que estábamos despedidos o que iba a revisar nuestros legajos para ver si hay irregularidades que teníamos como empleados. Y según avanzarán nos iban a ir reincorporando a nuestro trabajo. Cosa que no sucedió”, relato ante la decisión del intendente de despedir a trabajadores.
Continuo “al ver un manoseo por los funcionarios, el intendente actual (Antonio Alaniz) empezamos a tomar ciertas medidas y pasos a seguir. Hemos respetado las medidas desde diciembre, todos los acuerdos porque estamos nucleados en el gremio de SIJEMPRO. Gremio que nos representa como empleados municipales. Queríamos que reconozcan que buscamos diálogo para resolver el tema laboral. El 15 de diciembre vimos que no nos reincorporaban. El gremio firmó un acta acuerdo que debíamos esperar 30 días y nada. Pasaron Navidad, Año Nuevo y no los escrachamos, no los molestamos. Todos con paciencia porque respondemos a un gobierno radical de la provincia y tratando que la figura del político no se vea empañada, pero parece que esperaban que empecemos a tomar medidas. Se llegó a una conciliación entre SIJEMPRO y el municipio de Santa Clara como mediación al ministerio de Trabajo hasta el 26 de enero. Estamos a 2 meses sin respuesta” manifestó Villafañe en defensa de su fuente laboral.
“Trabajo hace 7 años, pero hay compañeros con una antigüedad de 12 a 13 años la mayoría estamos a la espera que nos reintegren a nuestros puestos laboral y tenemos una ordenanza para evitar el manoseo y ratificada en el 2023 y evitar este proceso que sufre el trabajador. Para el intendente esta ordenanza no tiene validez se entiende que pasa por el Concejo Deliberante y se hace ley, el intendente promulga o veta, y a él no le compete porque es de 2022”, repasa la trabajadora municipal.
“El intendente anterior se adhirió al decreto del gobierno provincial de Gerardo Morales y estamos amparados. Y hoy no tenemos respuesta, hay trabajadores con hijos con discapacidad, menores, mujeres embarazadas estamos esperando respuesta donde tenemos una ordenanza”, remarco ante días críticos que atraviesan.
“A nosotros esto nos supero, hablamos con autoridades máximas del gobierno. Estamos blanqueados, recibimos el bono de Carlos Sadir; pero no cobramos nuestro sueldo. El intendente se quedó con los salarios de los 70 empleados, queremos saber que pasó con ese dinero y con nuestro trabajo” se pregunto la mujer que oficia de vocera del grupo de trabajadores.
La noche del lunes pasaron la noche a la intemperie, fueron notificados por efectivos policiales por estar en lugares públicos y que debían retirarse.
Pasan los días y horas, los trabajadores piden que se cumplan las ordenanzas vigentes, y esperan señales del gobierno radical el cual han apoyado en las elecciones.
Los trabajadores denunciaron el maltrato que reciben por parte de Cayo ante el reclamo legitimo laboral, y esperan que el gobierno de la provincia solucione el conflicto municipal
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