Una Mesa del Agua a la cual no fueron invitadas las comunidades indígenas y donde, a pesar de la participación de funcionarios y especialistas, no hubo detalles del Plan Maestro Hídrico al que apuesta el gobierno de Sadir, por el cual legisladores de la izquierda pedirán informes en la Legislatura sobre el acuerdo.
Convocada por la Dirección Provincial de Recursos Hídricos, la convocatoria tenía como eje dar a conocer el convenio firmado entre el Ejecutivo, el CFI (Consejo Federal de Inversiones) y la empresa israelí Mekorot.
A pesar de ello, poco se pudo saber de las obras: dividido en cinco etapas, las mismas se ejecutarán en un plazo de 25 meses. El fin último, según explican las autoridades gubernamentales es realizar una planificación integral de los recursos hídricos de la provincia, desde la gestión de la oferta y la demanda hídrica, la optimización de la disponibilidad del recurso, entre otros puntos. En ese sentido, el director general de Gestión de Recursos Hídricos de la DPRH, Edgardo Sosa, fue el encargado de detallar sobre el recurso hídrico en la provincia, sus usos y oportunidades; los objetivos generales y específicos, etapas, plazos, actores vinculados, modalidad de generación de información, compromiso y otros aspectos del Plan Maestro.
Sin embargo, nada se habló sobre los términos del convenio que firmó la provincia con Mekorot, empresa cuestionada por la distribución del agua en Palestina, negándole el recurso.
Frente a ello, la diputada del FIT Unidad, Natalia Morales, quien estuvo acompañada por el presidente del bloque Gastón Remy en la jornada del martes en la Mesa del Agua, expuso varios cuestionamientos, además de señalar que pedirá al Ejecutivo que presente un informe en la Legislatura sobre los puntos del convenio.
“En la instancia de hoy, ningún funcionario dio cuenta de los términos del acuerdo entre el Gobierno de Jujuy, con Mekorot y el CFI, tampoco el presupuesto implicado para la realización del Plan Maestro y de dónde provendría el mismo, como tampoco los criterios convenidos, aspectos que solicitaremos a través de un pedido de informes”, expresó Morales.
Asimismo, la diputada apuntó a la falta de convocatoria a los pueblos originarios que llevan adelante una lucha por la defensa del agua. “Queda claro que los procesos democráticos de consultas previas a comunidades indígenas y acceso a la información en materia ambiental, especificados en el Acuerdo de Escazú (Ley 27.566) o el Convenio 169 de la OIT (Ley 24.071), que tendrían que haber realizado previo a la firma del Convenio, no fueron garantizados”, recordó.
Por otra parte, la referente de la izquierda apuntó a la cuestionada consultora israelí y señaló “desde el PTS FIT somos parte de la campaña activa en solidaridad con el pueblo palestino. Sabemos que detrás de los convenios con Mekorot está la profundización y el apoyo de Gobiernos provinciales como el de Carlos Sadir y de Milei con el Estado colonialista de Israel, para avanzar con un plan acorde a la profundización de la matriz extractivista y garantizar el agua para el mismo, lo cual pone en riesgo el derecho universal al acceso y cuidado de ese bien común afectando las necesidades sociales y el uso racional”.
Por último, Natalia Morales celebró que las comunidades indígenas se presentaran en la reunión para manifestar su postura “fue muy importante el rechazo expresado y muestra una vez más, que en la provincia se va a defender el agua y los bienes comunes ante las políticas de saqueo en curso, que no sólo incluyen los convenios con Mekorot, los lazos con el Estado sionista de Israel, sino también con la Ley Bases y leyes de emergencia al servicio de los grandes empresarios y las multinacionales. Más que necesario, que la respuesta sea masiva en las calles, con un plan de lucha y el paro nacional que incluya Fuera Mekorot y contra el genocidio en Palestina por parte del Estado de Israel”.