A las altas temperaturas que se registran en la provincia, el paro de 24 de la UTA y la jornada de protesta con ruidazos y cartelazos en Jujuy prometen una jornada caliente para este miércoles.
Tal como lo anticipó ayer, la UTA comenzó una abstención de tareas frente al incumplimiento de la liquidación de los haberes de octubre. La medida de fuerza afecta a los servicios de corta y media distancia y será la antesala del paro, también de 24 horas, que convocó la Intergremial y que hoy tendrá como primera acción una jornada de protesta. El reclamo: la apertura de paritarias.
La cuestión de salarial es una constante en el conflicto que padecen trabajadores de la administración pública, desde que asumió en 2015 la gobernación Gerardo Morales en 2015, las negociaciones paritarias se han caracterizado por la imposición y el ajuste. De salida, el dirigente radical mantiene la misma política, aunque este año la docencia logró importantes avances, luego que iniciara a principios de junio un paro por tiempo indeterminado.
La lucha de educadores tuvo un gran apoyo del conjunto de la sociedad por los salarios de pobreza que recibían, aunque las movilizaciones también se nutrieron del descontento por la reforma parcial de la Constitución.
Luego de más de un mes de lucha, el CEDEMS aceptó la oferta salarial y levantó el paro. Semanas después haría lo mismo ADEP, aunque mantenía algunas medidas de fuerza.
Los descuentos que, en algunos casos superaron los 100 mil pesos, otra vez puso a docentes en pie de guerra y el tema se judicializó. La premisa del gobierno era “día trabajado, día pagado”, sin embargo, hubo denuncias que señalaron que se descontaron hasta días sábados y domingos.
Fue en junio cuando el Ejecutivo se había comprometido a negociar mes a mes mejoras salariales frente a los altos niveles de inflación, dicha promesa no fue cumplida y afectó a todo el arco de trabajadores dependientes del Estado.
Así, la última medida tomada para mejorar la remuneración fue otorgar una suma fija de entre 7 y 10 mil pesos con los haberes de septiembre y octubre, por lo que desde la Intergremial denunciaron un congelamiento de salarios que ya estaba un 25% por debajo de la inflación.
Con reiterados pedidos de apertura de paritarias, los sindicatos pusieron como fecha límite el pasado 26 de octubre para que el gobierno negociara nuevos incrementos. Sin respuesta, la Intergremial convocó a una jornada de lucha por 48 horas, siendo este miércoles el día en que desarrollarán ruidazos y cartelazos, mientras que mañana habrá un paro con movilización.
“No hubo ninguna propuesta de un aumento real que dignifique el salario de los y las profesionales de la administración pública”, indicaron desde APUAP, aunque la situación es generalizada para todos los sindicatos, que están siendo nuevamente convocados a reuniones de negociación, aunque en algunos casos el gobierno no lleva ninguna propuesta concreta, tal como ocurrió el viernes 3 con docentes.