En la sede del Ministerio de Educación, finalmente ayer se concretó la reunión paritaria con los gremios docentes, y pese a que el titular de la cartera laboral, Normando Álvarez García, había reconocido el desfaje en los salarios, lo cierto, es que desde el gobierno provincial no se realizó ninguna oferta, por lo cual, desató el enojo de los sindicatos.
Durante la reunión, los sindicatos de educación exigieron algunos puntos en particular: mantener la suma fija de 2 mil pesos otorgada desde marzo; el blanqueo de uno de los ítems del salario como el “estado docente”, que implicaría 3.690 pesos; además del pago complementarias históricas, que no se abonan desde 2012 al 2015.
Por su parte, los funcionarios del gobierno provincial, entre ellos, la ministra de Educación, Isolda Calsina, su par de Trabajo, Normando Álvarez García, y de Hacienda, Carlos Sadir, solo dejaron deslizar que aplicarán los incrementos acordados en la paritaria nacional, es decir, subir el piso salarial a 23 mil pesos, además del pago de la suma extraordinaria de 4.840 pesos, que se abonará en cuatro cuotas de 1.210 pesos en abril, mayo, junio y julio.
Desde los gremios mayoritarios -ADEP y CEDEMS- fueron los que se mostraron más disconformes con la reunión. El secretario general de ADEP, Darío Abán, consideró que los 23 mil pesos de sueldo “debe ser el piso de negociación y a partir de allí el gobierno debe ofrecer la recomposición salarial propiamente dicha. A nosotros además del tema salarial, nos preocupan las diversas problemáticas educativas”. Sobre este punto indicó la urgencia en el tratamiento respecto a las escuelas profesionales, la falta de entrega de cargos, la inmovilidad de cupos, entre otros.
En cuanto a la postura del CEDEMS, Carlos Montero señaló “debemos tener un aumento al menos del 30% debido a que hemos perdido mucho poder adquisitivo en los últimos años”.
Sin propuesta y sin acuerdo, la negociación por los incrementos salariales del 2020 quedó en cuarto intermedio, y se retomará recién el día martes.
Fuente: Somos Jujuy