El incendio y la explosión ocurrida en el Ingenio La Esperanza que dejó como saldo seis víctimas fatales, alertó a los trabajadores del Ingenio de Ledesma que en el día de ayer, hicieron un pedido de reunión de urgencia para hablar sobre las irregularidades en lo referido a la seguridad laboral.
El documento firmado por el secretario general Rafael Vargas, el secretario gremial Pablo lembo y el secretario de acción social Roberto Perea, los tres pertenecientes al Sindicato de Obreros y Empleados del Ingenio Ledesma (SOEIL), detalla que fueron varios los planteos realizados por los delegados de la fábrica de alcohol y en la de bioetanol donde las condiciones de seguridad van bajando la calidad respecto a las normas estándar, situación que se agrava en número y que los encargados de esas áreas y el departamento de seguridad e higiene laboral de la empresa no brindan respuestas.
Por ello, el documento plantea la profundización de estos reclamos exigiendo que se le den la importancia que se merece para evitar una catástrofe como la del Ingenio La Esperanza.
Según detalla la presentación hay “manipulación de producción químicos, sin previa capacitación y sin con protección personal”.
Asimismo, también denunciaron las condiciones de stress laboral al cual son “sometidos los jefes y los supervisores de las distintas áreas para conseguir los objetivos de productividad mermando así la calidad del ambiente de trabajo y convirtiéndose el hostigamiento”.
Sobre ese punto se indicó que el doctor Jorge Diego Paredes del Departamento de Medicina de Trabajo “brinda alta a los trabajadores sin una plena recuperación de las dolencias obligando a los mismos asistir a sus puestos de trabajo sin estar aptos” para realizar las tareas.
Además, explica el documento que existe “derrame continuo y progresivo de alcohol, mosto y productos químicos en distintos lugares de la planta de alcohol y Bioledesma” que generan una pérdida para la institución y un riesgo constante para los operarios que desarrollan así su trabajo. Ambos productos indican que, además de ser tóxicos son inflamables, y una de esas goteras se descarga sobre los equipos de iluminación eléctrica.
Sobre este caso, subrayaron que fue denunciado en el mes de septiembre por dos delegados sindicales pero que hasta el día de la fecha no obtuvieron respuesta.
Otro de los puntos en los cuales hicieron referencia, es la excesiva rotación de puestos de trabajo del personal haciendo que los trabajadores que son especializados en un área concreta deban enfrentarse a otro tipo de trabajo que desconoce.
En este punto particular también reflejaron que desde el año 2017 los trabajadores especializados fueron reemplazados por máquinas o trabajadores rurales que desconocen del trabajo industrial haciendo que se eleven los riesgos dentro de la jornada laboral.
Desde el sindicato exigen que en esta reunión se facilite toda la documentación e informes del último año, en lo que respecta a la seguridad laboral e higiene de la empresa, para poder hacer un análisis detallado de cómo se encuentra la fábrica actualmente.
Por último, detalla otro tipo de irregularidades ocurridas en el transcurso del año en los cuales señalaron que no hubo una tragedia por cuestiones milagrosas.