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El vocero presidencial apuntó a su eliminación

El más bajo de los últimos 20 años y con amenaza de desaparecer, el salario mínimo, vital y móvil en la era Milei

El incremento será del 9,3% y se aplicará en cuatro cuotas a cobrarse en diciembre, enero, febrero y marzo. Así, recién en el tercer mes del 2025, el mismo llegará a los 296.832 pesos. La mejora representa poco más de 25 mil pesos

El más bajo de los últimos 20 años y con amenaza de desaparecer, el salario mínimo, vital y móvil en la era Milei

 

Sin acuerdo entre las partes en la reunión del 19 de diciembre, finalmente ayer por decreto, el Ejecutivo nacional dispuso cuál será el nuevo valor del salario mínimo vital y móvil, el cual apenas tendrá un incremento del 9,3%, por lo que se ubica como el más bajo de los últimos 20 años, a su vez, el vocero presidencial, indicó que el mismo puede llegar a quedar sin efecto.

Bajo la resolución 17/2024 de la Administración Pública Nacional, se dispuso que la actualización se cobrará en cuatro cuotas a liquidarse en diciembre, enero, febrero y marzo, por lo que recién en el tercer mes de 2025, el SMVM alcanzará los 296.832 pesos, lo que representa poco más de 25 mil pesos del valor actual (271.571 pesos vigentes).

La implementación de esta suba es acorde a lo que ofrecieron las cámaras empresarias que apuntaron al 8,8% de mejora. Por su parte, las centrales de trabajadores esperaban que el salario garantice una Canasta Básica Total que mide el umbral de la pobreza. La propuesta de la dirigencia sindical apuntaba a una sustancial mejora en diciembre, pasando de los $271.571 a los $570 mil. En tanto, hasta marzo, esperaban llegar al millón de pesos.

Así, la comparación entre el SMVM con la evolución de la Canasta Básica Alimentaria, deja en claro la pérdida sustancial del poder adquisitivo: el salario en marzo apenas equivaldrá a apenas un 60,9% del valor de los alimentos que necesita una familia integrada por dos adultos y dos menores para no ser considerada indigente. El valor se encuentra en su mínimo histórico.

Un informe del Instituto de Estudios y Formación de la CTA Autónoma, conducido por Luis Campos, asegura que se trata del “valor más bajo de las últimas dos décadas. Cayó un 17,8% contra diciembre de 2023 y un 39% contra fines de 2019”.

El estudio, además, explora en el significado institucional del deterioro del haber mínimo. Es que, según dispone la legislación vigente y en particular el artículo 116 de la Ley de Contratos del Trabajo (LCT), el salario mínimo debe alcanzar para afrontar los consumos de una familia en nueve ítems que incluyen “alimentación, vivienda, educación, vestimenta, asistencia sanitaria, transporte y esparcimiento, vacaciones y previsión”. Ese concepto se acerca más bien al de la denominada Canasta Familiar que el INDEC dejó de medir hace ya muchas décadas y que sólo está disponible a partir de estudios particulares de organizaciones sindicales como CIFRA, UMET o, más directo, de la Junta interna de ATE INDEC que, en su último informe publicado establece que, basados en datos del propio Instituto, en septiembre el haber mínimo debió ser de 1.514.208 casi seis veces más que el valor del haber en aquel mes.

Pero, además, Luis Campos destaca que, en un contexto general de pérdida del poder adquisitivo, ha sido el haber mínimo el que más perdió con relación al resto de los salarios y alertó que “destruir el SMVM implica quitarles el piso a los salarios de los trabajadores de menores ingresos”. Y que, a la vez, mientras “en los años 90 el SMVM equivalía al 25% del salario promedio del sector privado registrado. En 2009 era del 45%. Hoy no llega al 20%”.

Las cúpulas sindicales rechazaron el bajo margen de mejora mediante comunicados, donde además apuntaron a cómo afecta esto en toda la masa trabajadora.

“El salario mínimo alcanza a unos 6 millones de trabajadores formales, pero también impacta en los informales y en diversos programas sociales”, indicaron desde la CGT y apuntaron que de allí “deriva la esencial importancia de la cifra que lo constituye”.

Las dos CTA, por su parte, emitieron un comunicado conjunto en el que aseguran que “el gobierno fijo el salario mínimo en complicidad con el pedido de los empresarios”. Las dos centrales aseguran que se trata de “un complot de los sectores empresariales con el gobierno nacional que denigra un espacio tripartito como lo es el Consejo del Salario, para seguir derrumbando los salarios de los trabajadores, para acrecentar las ganancias de sus empresas”.

Por su parte, el gobierno, hizo pública su opinión a través del vocero presidencial Manuel Adorni que incluso fue más a fondo que la denuncia de complot que le hicieran las CTA. Es que, según Adorni, “tener un salario mínimo, conceptualmente, es un error”. El funcionario que percibe un salario equivalente a 17 veces el salario mínimo, detalló que “si hay personas dispuestas a trabajar por menos que ese valor, técnicamente, no las podrías contratar” y, adelantó, “cuando Argentina sea completamente normal, el salario mínimo dejará de existir”.

Fuente: Tiempo Argentino



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