En el marco de un nuevo simulacro del escrutinio provisorio a 22 días de las PASO, Adrián Pérez admitió que como se usa "un software nuevo" que estuvieron "cambiando" se lo darán a conocimiento a la oposición "si la prueba sale bien" y que si hay errores "decidirá la Justicia". La Cámara Electoral había dispuesto que eso tenía que pasar por lo menos 30 días antes.
Tras las continuas fallas en las anteriores pruebas, el Gobierno realizó esta mañana un nuevo simulacro del escrutinio provisorio para probar el sistema de transmisión de telegramas que implementará en las elecciones primarias del 11 de agosto, y ante eso insistió en que la flamante modalidad "dará mayor seguridad y transparencia" al recuento de votos.
A diferencia de las anteriores pruebas, en la de hoy participaron los apoderados de distintos partidos políticos y la mirada se posa sobre el sistema de transmisión digital de telegramas con el conteo de sufragios de cada mesa electoral. En estas elecciones tendrá participación la empresa venezolana SmartMatic -cuestionada en todo el planeta y desplazada en una gran cantidad de países- en reemplazo de la histórica Indra.
Sin embargo, lo que más llamó la atención por la gravedad que implica y quedó expuesto hoy por el propio Gobierno en boca de Adrían Pérez, el secretario de Asuntos Políticos e Institucionales del Ministerio del Interior, es que Juntos por el Cambio sabe que por esconder el software del escrutinio provisorio está violando las decisiones de la Cámara Nacional Electoral.
En un video que publicó a través de Twitter el especialista en seguridad informática Javier Smaldone, se escucha a Pérez, en pleno inicio del simulacro de hoy y a 22 días de las PASO, admitir que como se usa "un software nuevo" que estuvieron "cambiando, modificando, corriendo" se lo darán a conocimiento a la oposición "si la prueba sale bien" y que en caso de que haya errores "decidirá la Justicia".
Quiere decir que el Gobierno sabe y reconoce que está violando la ley: en la acordada 3/2017 de la Cámara Nacional Electoral dispuso que "el programa de escrutinio provisorio" y "todos los componentes de software que eventualmente estuviesen involucrados" debían ser puestos a disposición de todas las agrupaciones políticas que participan de las elecciones por lo menos 30 días antes de las mismas. Nada de esto se cumplió.
Además, se advierte en esa normativa que "en caso de que se produzcan modificaciones" en el software, esos cambios también deberían haber sido puestos "a disposición" de los partidos políticos que sean parte de los comicios. Evidentemente, esto tampoco pasó.
Fuente: Política Argentina
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