Muchas madres que cobran la Asignación Universal por Hijo, se encuentran con que el pago del beneficio está suspendido desde principios de año. El motivo de este corte, según se les informa en la ANSES es que, para sorpresa de las beneficiarias, ellas declararon tener ingresos superiores al Salario Mínimo Vital y Móvil cuando presentaron el Formulario 1.47 con los controles anuales de salud y escolaridad de sus hijos.
Ese formulario es más conocido como “la libreta” de la Asignación Universal, ya que en el primer año en que se comenzó a pagar se les repartió a las beneficiarias una especie de libreta donde debían consignar esos controles. Luego, a la luz de la debacle económica del país no se entregó más y las beneficiarias vuelcan los controles y los presentan en ese documento.
Ante este corte de la Asignación muchas madres informaron que ellas no han presentado “la libreta” en este año y menos han declarado ganar más que el Salario Minimo Vital y Movil, porque no alcanzan esos ingresos y difícilmente alguien conspire contra sus propios derechos.
Lo que explican desde ANSES que en realidad sucedió, es que el organismo procedió a realizar “cargas automáticas” de esos controles, repitiendo los que las madres habían presentado para cada niño en el año 2018. Esta presentación automática es parte del aplicativo lanzado para que las beneficiarias puedan acreditar esos controles a través de la página web de ANSES.
El problema es que el aplicativo funciona mal y las recargas automáticas realizadas tienen graves errores. El principal es que en el apartado Declaración Jurada marca que las mujeres tienen un ingreso superior al Salario Mínimo; y de esa manera incumplen uno de los requisitos para el cobro. Paso seguido se les suspende el pago de la Asignación Universal.
Las mujeres se enteran de este error de sistema recién cuando van al cajero a cobrar su prestación y se encuentran con un saldo de cero pesos. Y siendo ellas las perjudicadas, deben asistir a ANSES, presentar de nuevo los controles de Salud y Escolaridad y pedir les levanten un reclamo para recuperar el cobro, con los consecuentes trastornos que deben enfrentar para conseguir ser atendidas en un organismo que no da abasto.
En resumen miles de familias dejan de cobrar la Asignación por un error de ANSES, pero son las madres las que luego deben solucionarlo, cuando muchas veces ya han pasado dos o tres meses sin cobrar.
No es la primera vez que bajo la administración Macri, la ANSES corta beneficios de manera arbitraria o por impericia. Estos cortes del pago se suman a los que está aplicando el organismo de seguridad social a partir de la “Presunción de Ingresos”, ítem por el cual, sin la aplicación de un parámetro claramente definido, se suspende el beneficio a las madres que alguna vez fueron monotributistas (o los fueron los padres de sus hijos), quienes luego deben hacer un largo descargo sosteniendo que en realidad no tienen ingreso alguno.