“Acto unilateral y egoísta que desconoce el accionar de la justicia” catalogó Moisés a la condecoración del ex embajador

Sin importar las repercusiones diplomáticas que puede generar, Gerardo Morales condecorará hoy al radical Normando Álvarez García por su accionar como embajador en Bolivia durante el golpe de Estado, reconocimiento que la diputada nacional Carolina Moisés catalogó como “unilateral y egoísta”, además de desconocer el accionar de la justicia argentina que investiga los hechos.

La legisladora del Frente de Todos envió de manera formal una carta al actual embajador boliviano en Argentina, Jorge Ramiro Tapia y a los cónsules del Estado Plurinacional de Bolivia con asiento en San Salvador de Jujuy y La Quiaca, Juan Ino Mamani y Julio Enrique Vidangos Ramírez, en la cual manifestaba su “enérgico repudio” a la condecoración al ex embajador argentino en el país vecino y actual ministro de Trabajo de Jujuy, Normando Álvarez García, una medida dispuesta por el Gobernador de Jujuy Gerardo Morales que se concretará en un acto oficial a las 10.30 de este jueves.

“Es un acto unilateral y egoísta que desconoce el accionar de la justicia del Estado argentino, en un acto de mala fe que no representa al pueblo jujeño” señaló Moisés.

Además, mediante una publicación en la red social Twitter, Moisés se mostró “sorprendida” por la invitación oficial que recibió para participar de esa ceremonia en la que se condecorará “al ex embajador argentino en Bolivia, seriamente implicado en el Golpe de Estado y en la denuncia sobre tráfico de armas” subrayó.

“Si conserva algún apego a los valores democráticos que alguna vez distinguieron a la UCR, Gerardo Morales debería separarlo preventivamente de su cargo hasta que la Justicia determine si tuvo responsabilidad en facilitar el quiebre institucional”, enfatizó la diputada oficialista.

Y fue más allá al advertir que “con este respaldo inoportuno a un correligionario implicado en un gravísimo episodio”, el gobernador de Jujuy “asume su complicidad y participación directa, además de buscar desafiar la autoridad presidencial y legitimidad del Presidente Alberto Fernández en la política internacional argentina”.