Acusaciones cruzadas entre Lello Sánchez y el juez que lo denunció

Una denuncia que reveló el profundo clima de hostilidad que se vive dentro del ámbito judicial de la provincia, en particular, con la figura de Sergio Lello Sánchez, titular del MPA, órgano extrajudicial que se creó apenas asumió Gerardo Morales la gobernación en 2015 y que sirve como brazo ejecutor de su política de persecución.

Fue el jueves pasado cuando el juez de Control, Rodolfo Zurueta presentaba una denuncia penal y pedido de juicio político para que Lello Sánchez sea apartado de su cargo como fiscal general del Ministerio Público de la Acusación. Entre los delitos que se le endilgan está encubrimiento, abuso de autoridad y violación de sus deberes como funcionario público, ello, derivado de distintos expedientes donde se cuestiona el accionar de ayudantes y agentes fiscales que están a su cargo.

Respecto a estas acusaciones, ayer Lello Sánchez señalaba “yo cumplí con mi obligación legal de ponerme a disposición del fiscal”, algo que no es verdad, dado que la presentación debe hacerse ante un juez, tal como el propio funcionario aclaró durante la entrevista que concedió a Radio Provincia.  

“Voy a hacer la presentación ante el juez, pero habiendo identificado quien es el fiscal que realiza la investigación, que ya está identificado, porque este proceso que llama vindicarse se hace ante los jueces, ante alguna cuestión, algún trascendido o noticia que se tenga de algún funcionario público se le atribuyan delitos, se presenta ante el juez y el juez lo tiene por vindicado, eso ya también lo voy a hacer” expuso y agregó “por tener conocimiento por parte de mi función y por el hecho de que fue mediatizado este tema por el propio denunciante, habiendo identificado quien investiga, realicé una presentación espontánea ante el fiscal dando alguna explicación de lo que pude percibir acerca del contenido de la denuncia”.

¿Por qué Lello Sánchez acudió primero al fiscal?, porque los mismos están bajo la órbita del MPA, órgano que él mismo conduce. No ocurre lo mismo con jueces, donde no tiene ninguna injerencia (o debería no tenerla, si se respetara la división de poderes del Estado).

A modo de defensa de las acusaciones, Lello Sánchez pudo en duda sobre el verdadero objetivo de la denuncia penal de Zurueta y su pedido de destitución del MPA lanzando “es una denuncia mediática que no tiene ningún contenido que pretende asignarle el denunciante”. Otra mentira, la denuncia no es mediática, efectiva se realizó en el fuero penal. Además, mencionó “no hay que perder de vista un detalle, que quizás tenga vinculación con este tema, esta persona tiene que ir a juicio oral y público la semana que viene”.

Revelando que Zurueta debe ser llevado al banco de los acusados por una denuncia de cuando era secretario de Seguridad, Lello Sánchez, casi como amenaza recordó “además tiene causas que se investigaron en el ámbito del MPA vinculadas a violencia de género donde una mujer lo denunció por lesiones en un contexto de violencia de género y de ahí se desprende también, que esta persona está acusada en esa misma denuncia por suministro gratuito de estupefacientes, quizás esté vinculado con la denuncia que me hace, pero yo no puedo afirmarlo, pero llama poderosamente la atención”.

Casi en paralelo, Zurueta también exponía sus argumentos en contra de Lello en otra entrevista radial. “Entiendo que el titular del MPA, el doctor Lello, es un formador serial de causas penales contra los jueces”, manifestó en El Submarino radio, además de señalar que la mujer que lo denunció fue llamada por el MPA para que realizara la presentación.

Y subrayó “el doctor Lello pretende que nosotros resolvamos conforme a su intención y no a derecho. Entonces si no lo hacemos se molesta y tiene esta actitud de hacernos causas penales. Para mí es una cuestión netamente personal de él con nosotros. Quiero creer que no es una cuestión política. Yo vengo sufriendo esta persecución desde el año 2016 a la fecha. He recibido numerosas recusaciones. Si él sabía que en una causa yo no iba a resolver como él pretendía, los fiscales me recusaban. Y así fue que se formó primero una causa, después otra”.

El detonante para citarlo a juicio parece responder a su fallo a favor de las comunidades indígenas por los cortes de ruta en junio, tras aprobarse la reforma parcial de la Constitución. “oda esta situación se agravó cuando yo resolví el habeas corpus a favor de las comunidades aborígenes que habían cortado la ruta en el norte y como juez de control de turno me tocó resolver eso. Entendí que era procedente hacer lugar e hice un llamado de atención sobre la presencia de la fuerza de seguridad, en este caso a la policía, para que se abstenga de realizar cualquier acto de violencia, para que no se lamentara la pérdida de vidas o cualquier otro tipo de lesiones. Y solicité que se concertara una mesa de diálogo con los distintos actores, convocada por el obispo de Jujuy. Parece que eso le molestó a esta persona. Ahí aparecieron las denuncias y todas causas se activaron como avión. Pero las causas contra mi persona no tienen asidero jurídico. Son todas inventadas”, sostuvo Zurueta, sobre quien también pesa un pedido de apartamiento.