Como suele ocurrir todos los años, la discusión en el Congreso por la ley de presupuesto se extendió por largas horas, lo mismo ocurrió ayer cuando la Cámara de Diputados de la Nación inició el debate al mediodía finalizando alrededor de las 6.30 de hoy, donde el oficialismo logró dar media sanción a la ley de leyes.
El dato sobresaliente se debió al quiebre dentro de Juntos por el Cambio, donde el voto del bloque se dividió entre las abstenciones, los votos negativos y afirmativos.
Mientras que el bloque cambiemita había indicado para su bancada que la posición iba a ser el de la abstención, quienes no cumplieron con ello fueron Omar Demarchi, Fernando Iglesias, Luis Juez, José Patiño, Francisco Sánchez, David Schelereth y Pablo Torello (PRO), junto a Mónica Frade, Leonor Martínez Villada, Paula Oliveto, Mariana Stilman, Alicia Tereda y Mariana Zuvic de la Coalición Cívica.
También se sumó el voto negativo del FIT.
En tanto, hubo otros votos de JxC que acompañaron la propuesta del oficialismo: Jorge Rizotti, Omar Monaldi y Gabriela Burgos de Jujuy a pedido de Gerardo Morales, como así también Ingrid Jetter y Sofía Brambilla de Corrientes comandadas por su gobernador Gustavo Valdéz; y el diputado por la Rioja, Felipe Álvarez.
En resumen, fueron 139 los votos afirmativos, 15 negativos y 90 abstenciones dando media sanción para la ley del Presupuesto General de la Administración Nacional para el ejercicio fiscal 2021.
El debate duró unas 16 horas y si bien tradicionalmente un proyecto de estas características termina con el cierre de los presidentes de bloques esta vez no hubo palabras finales.
La sesión se realizó bajo el protocolo de trabajo remoto, pero con unos 118 diputados de manera presencial. A la hora de la votación en el VPN (la plataforma digital en la que se conectan los legisladores para sesionar) habían 252 conectados. Pero hubo algunos representantes estuvieron ausentes a la hora de la votación, entre ellos Graciela Camaño (Consenso Federal).
Durante el debate, el miembro informante del proyecto, el oficialista Carlos Heller, aseguró al inicio “el presupuesto tiene como fin duplicar la inversión real en infraestructura productiva social”. Y señaló que “no se pueden hacer proyecciones más entusiastas que las planteadas en este proyecto que son moderadas, prudentes, serias y cumplibles”.
Heller explicó que “los escenarios macroeconómicos proyectados son compatibles con una economía que se recupera gradualmente del impacto generado por la pandemia”.
En ese sentido, el presupuesto 2021 tiene como ejes centrales el aumento de gastos de capital para realizar un plan de obras públicas y una fuerte reducción del pago de los intereses de la deuda a partir del éxito obtenido en el proceso de reestructuración.
Asimismo, el Presupuesto 2021 contempla un crecimiento de la economía del 5%, un déficit fiscal de 4,5% y destina el 2,2% a gastos de capital para obras públicas.
Fuente: Tiempo Argentino
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