Dos años, el tiempo que Milei dijo que tardará en bajar la inflación en su gobierno

Lejos de las frases explosivas y de las promesas de exterminar con el cáncer de la inflación, como manifestó en el último debate presidencial, Javier Milei vislumbró cuánto tardará en bajar ese índice, en caso de llegar a la presidencia: de 18 a 24 meses, es decir, recién a la mitad de su mandato.

Encerrado en el Hotel Libertador donde se encuentra alojado desde hace ya un tiempo, el libertario apenas concede entrevistas a medios de comunicación “amigos”, así, ayer mantuvo un diálogo en el programa A dos voces, donde fue consultado sobre las principales propuestas de campaña que efectuó y que fueron el motor de crecimiento de su figura: la dolarización y con ello, la reducción de la inflación.

“El día que uno frena la máquina de emisión de dinero, tarda entre 18 y 24 meses para que la inflación desaparezca. No puede tardar menos de un año y medio en bajar la inflación”, sostuvo el economista liberal, por lo que la promesa, de llegar a asumir la presidencia llegaría recién a la mitad de su mandato.

Para concretar esa medida, el libertario debería cumplir con la eliminación del Banco Central, algo que Sergio Massa ya cuestionó, poniendo como ejemplo que sólo hay tres países en el mundo que no cuenta con ese organismo, el más conocido, Micronesia, al cual señaló que es una guarida fiscal para narcotraficantes, entre otras actividades ilícitas.

Asimismo, el candidato de Unión por la Patria también aseguró que aún, los países que adoptaron el dólar como moneda -nombrando a Ecuador, El Salvador y Zimbawe- mantuvieron sus bancos centrales, además de cuestionar la importancia de la actividad económica de esas naciones.

Pese a las grandes dudas y críticas que expusieron economistas y dirigentes -incluso de su propio espacio-, Milei sigue insistiendo en la dolarización del país.

“La dolarización tiene dos partes, una respecto a cómo se limpian las Leliq (Letras de Liquidez) y otra de cómo se limpia la base monetaria”, comenzó a detallar el libertario.

Y profundizó: “las Leliq se estructura una operación financiera y en el lapso de tres meses puedo terminar limpiándolas, lo cual no es menor porque significa que se puede abrir el cepo sin que haya una hiperinflación. La cuestión de la base monetaria tiene un problema. El billete más grande de Argentina es el de dos mil pesos que compra, al tipo de cambio paralelo, dos dólares. Eso quiere decir que tenemos un problema operativo, de los billetes que necesitamos. Ese problema lo tuvo que enfrentar en su momento Ecuador cuando dijo que en 3 meses dolarizaban y no pudieron, recién lo hicieron a los 9 meses. El proceso de conversión de la base demanda más tiempo porque requiere deshacerse de los billetes”.

Las Leliq, un instrumento de deuda que creo el macrismo

Mientras Milei busca imponerse como un cambio en el cambio de la política -a la que tilda de “casta”- y acusa al gobierno kirchnerista de todos los males del país, en paralelo, sigue en pie el acuerdo con Mauricio Macri, quien fuera artífice de las denominadas Leliq, que tanto apunta el libertario desbaratar para lograr la dolarización.

Las Letras de Liquidez fueron creadas en enero de 2018, durante la presidencia de Federico Sturzenegger al frente del BCRA con el fin de mantener estable la emisión monetaria en pos de no generar inflación, son títulos de deuda emitidos por el Central para “secar la plaza de pesos” y evitar que éstos se vayan al dólar.

Dichas letras sólo pueden ser adquiridas por bancos: estos colocan dinero a la tasa fijada para esos instrumentos, el BCRA les paga los intereses. Lo negativo de esta maniobra, es que el Banco Central debe pagar cada 28 o 180 días, esos intereses a las entidades bancarias, con tasas que rondan entre el 118 y 120%, tasa que se renueva con los índices de inflación.

Creado para contener la emisión monetaria, si los bancos deciden deshacerse de las Leliq, el BCRA estará obligado a realizar una emisión monetaria para cumplir con ese pago, lo que deriva en una devaluación de la moneda y con ello, la perdida del poder de compra de los salarios de trabajadores.

La solución de Milei plantea un difícil panorama para el conjunto de la sociedad: la dolarización necesita de una gran devaluación del peso argentino.

Con información de Ámbito.com