Casi como un pedido de auxilio, el médico personal de Milagro Sala realizó una denuncia pública a través de redes sociales, en la cual sostuvo “el gobierno jujeño no atiende el reclamo y menosprecia su salud”.
En horas de la tarde del martes, Jorge Rachid manifestó su preocupación respecto al cuadro de trombosis que padece la lideresa y por la cual ya estuvo internada a fines de junio del año pasado. La presencia de policías dentro de la habitación -que Sala compartía con otras personas- portando sus armas derivó en una visita del presidente Alberto Fernández, quien le manifestó su apoyo.
“Estoy pidiendo el traslado de Milagro Sala a un centro de hemodinamia de alta complejidad dado el estado de su trombosis profunda en miembro inferior izquierdo que ya fue intervenido anteriormente. El gobierno jujeño no atiende el reclamo y menosprecia su salud”, expuso el médico.
Sin respuestas por parte del gobierno de la provincia, Rachid apuntó directamente al gobernador jujeño “hago responsable de la salud de Milagro Sala a Gerardo Morales”.
Por último, atinó que el cuadro de salud de la dirigente de la Tupac Amaru “no admite demoras”.
La preocupación del profesional de la salud no es menor: desde que la Corte Suprema de Justicia de la Nación ratificó la condena de 13 años en la causa Pibes Villeros, el gobierno de Morales emprendió una embestida para que Milagro Sala cumpla la sentencia en un penal, aún cuando hay sigue vigente un amparo de la CIDH -Corte Interamericana de Derechos Humanos- en la cual se establece condiciones alternativas de detención alternativas para la lideresa.
En ese sentido, las constantes maniobras que utiliza el Ejecutivo para trasladar a una cárcel a Sala también repercuten en su estado de salud.
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