Pese a que Gerardo Morales quiso correr del escenario a la dirigente social Milagro Sala, lo cierto es que la lideresa de la Tupac Amaru mantiene un alto perfil dentro de la política traduciéndose en encuentros con figuras del gobierno nacional, como lo fue días atrás la del ministro Agustín Rossi, pero también de otros ámbitos tal como ocurrió con la llegada del dirigente gremial Roberto Baradel, a la que sumó la diputada provincial Débora Juárez.
Sobre el encuentro, Sala detalló “la verdad que fue una sorpresa, fue algo muy bonito porque intercambiamos la política tanto nacional y provincial y la situación económica que está viviendo el país”, situación en el marco de la pandemia, pero que para la dirigente surge de las políticas aplicadas por el gobierno anterior “después de haber perdido las elecciones Macri como dejó el país” explicó la lideresa.
Sin embargo, también apuntó sobre el sistema judicial, tema del cual también se hizo mención durante el encuentro “cómo quedó constituida la justicia en el país, porque lamentablemente hasta el día de hoy está sufriendo el lawfare que pareciera ser una palabrita de moda, pero lamentablemente se viene aplicando ya hace casi 5 años en el país” subrayó la dirigente social.
Sobre este punto, además explicó que el lawfare es una maniobra para “disciplinar a los políticos y muchos de los que estamos sufriendo estas consecuencias del lawfare estamos resistiendo”.
Es por ello, que Milagro Sala consideró la visita de ambas figuras como algo “muy grato” recibir al “compañero Roby Baradel y a la diputada provincial Débora Juárez”.
De esta manera, pese a que aún sigue presa, Milagro Sala mantiene un alto perfil dentro de la política. Recordemos la llegada de Evo Morales quien pidió reunirse con la dirigente social antes de regresar a su país, encuentro que trascendió tanto en los medios nacional como internacionales.
Fue ese fin de semana, que la figura del gobernador Morales quedó totalmente desdibujada con la llegada del líder del MAS, quien horas más tarde se reunió con el presidente Alberto Fernández, en lo que fue su primera visita a la provincia como mandatario nacional.
Gerardo Morales no pudo participar de la celebración dado que sostuvo que en Bolivia no había habido un golpe de Estado contra Evo Morales, situación que lo eliminó automáticamente del encuentro.
Eso sin contar, que fueron reiteradas las veces que el gobernador jujeño anticipó la llegada del presidente a Jujuy, visitas que nunca se concretaron, señalando la distancia que mantiene el mandatario nacional con Gerardo Morales.
Recordemos que Alberto Fernández en 2016 vino a Jujuy para pasar el Año Nuevo junto a Milagro Sala, que por aquel entonces estaba alojada en el Penal de Alto Comedero. Un gesto más que elocuente ya que el actual presidente había señalado que si bien no compartía la forma de pensar de la lideresa, sabía que no tenía que estar presa.