La Reforma parcial de la Constitución se aprobó con la complicidad del Partido Justicialista, a pesar que el presidente de ese partido Rubén Rivarola trate de despegarse, es imposible con todo lo que viene sucediendo en Jujuy.
Duele que la dirigencia política se haya alejado de la realidad de las jujeñas y los jujeños, por el contrario, la lucha docente logró la adhesión de diferentes sectores gremiales, sindicales, políticas, organizaciones sociales y fue la unidad que no realizó la dirigencia política. En especial, el justicialismo que volvió apostar a los apellidos históricos del PJ, abocarse a una campaña electoral ajena a la realidad.
El rol del justicialismo en Jujuy es jugar a ser socios de Morales porque comparten negocios que hacen con El estado provincial.
Se dijo años atrás que Jujuy era históricamente justicialista, aunque desde el 2013 el PJ jujeño no tiene conducción, tal es así, que en las elecciones provinciales del 7 de mayo, el peronismo -dividido- conducido por Rivarola apenas logró alcanzar el 20% de las voluntades de la población jujeña. Parece que tampoco había voluntad de ganar en las urnas. Un ejemplo de ello fue la denuncia que hizo la concejala y candidata a intendenta de Libertador General San Martín, Patricia Gutiérrez respecto a hechos de fraude electoral. Por su parte, el apoderado del Frente Justicialista avaló los resultados al no presentar ninguna impugnación al Tribunal Electoral.
La lealtad de Rivarola a Morales ya no sólo se circunscribe al ámbito de la Legislatura, el empresario salió a repudiar los hechos de violencia ocurridos ayer, en la cual esgrimió los mismos argumentos que utilizó Gerardo Morales para deslegitimar la protesta social.
En una entrevista radial, el periodista Pablo Duggan indagó al presidente del PJ jujeño sobre si el partido había acompañado el proyecto de reforma parcial de la Constitución. En todo momento, Rivola osciló entre despegarse de la votación del diputado Fernando Posadas (que a fuerza de repreguntar varias veces lo nombró) y justificar el acompañamiento en la Convención Constituyente al oficialismo.
Un peronismo cerca del poder y lejos del pueblo
La brutalidad de la represión dispuesta por Gerardo Morales hizo que la noticia escalara a medios nacionales. En ese marco, Duggan llamó al presidente del PJ para que le explicara cuál era la postura del partido, entrevista donde Rivarola dejó expuesta la pasividad del pejotismo en medio del desproporcionado operativo del gobernador y que dejó más de un centenar de heridos.
“Lo echamos del bloque, no podemos hacer nada más”, quiso justificar Rivarola sobre el avance de la reforma constitucional que impulsó Morales que obtuvo gracias al voto 32 que le concedió Fernando Posadas, votando en contra de la postura del bloque peronista. A pesar de ello, el diputado nunca tuvo ninguna sanción.
Ante la consulta del periodista sobre si efectivamente el PJ era un aliado de Morales, el empresario sostuvo “soy un legislador hace bastante tiempo, no soy una oposición destructiva” y allí fue cuando esgrimió los mismos argumentos de Morales sobre las manifestaciones “acá de golpe apareció toda la izquierda unida y viene a hacer problema en Jujuy”, tal como lo había señalado el gobernador en redes sociales.
En la misma sintonía que el dirigente radical, Rivarola separó el reclamo de la docencia, al cual consideró justo.
Ante la sorpresa de las declaraciones, Duggan apuntó sobre el rol del peronismo en la Convención Constituyente “nuestros constituyentes han hecho todos los despachos en minoría”, trató de fundamentar la votación del PJ de la reforma.
Rivarola omitió comentar todas las irregularidades en las cuales se concretó la discusión de la Convención, tal vez porque el PJ le aprobó el reglamento que le concedía al oficialismo hacer pasar el proyecto con mayoría simple, a sabiendas que tenía los votos necesarios, sin tener que contar con la voluntad del peronismo.
De los 48 constituyentes electos, 29 eran oficialistas, 13 eran justicialistas y 6 de la izquierda. Estos últimos hicieron el rol de oposición, porque el justicialismo fue condescendiente con Morales. Se conformaron comisiones a puertas cerradas, invitaron a referentes políticos, gremiales, sociales para realizar aportes que no obtuvieron devolución. Sin diálogo, un debate inútil.
El justicialismo también pudo haber renunciado a las bancas para señalar que las reglas del juego fueron impuestas por Morales. Aun así, el justicialismo acompañó el proyecto, votó en general la Reforma y en los artículos en particular. Respecto al de la protesta votaron en contra un detalle, ya que la reforma no garantiza derechos, sino que hay un retroceso.
Durante la entrevista Rivarola se vio enredado en sus verdades, lo que muestra su traición al pueblo jujeño y la lealtad a Morales. La aprobación de la reforma debería haber contado solo con los 29 oficialistas y el resto haber renunciado en general.
El proyecto de Reforma de Morales es el laboratorio de prueba para que este modelo de provincia se aplique y Reforme a nivel nacional una constitución represiva, violando derechos
El PJ jujeño lo mínimo que merece es la intervención y los convencionales que asumieron en nombre de las y los jujeños deberían ser expulsados.
El caos en Jujuy es sostenido por el PJ jujeño.
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