Entre hijos, hermanos, cuñada, sobrinos, los contratos temporales que dispuso la senadora libertaria Vilma Bedia en su despacho le cuestan al erario público unos 10 millones de pesos mensuales, una suma considerable teniendo en cuenta el discurso de austeridad que plantea el gobierno de Javier Milei, quien dio por cerrado el asunto, dejando entrever que dicha nómina de parientes de la legisladora jujeña quedó afuera.
El acomodo de la parentela de Vilma Bedia por parte de La Política Online rápidamente se desparramó por varios medios. Las críticas giraron en torno a la actitud nepotista de la senadora de La Libertad Avanza y también por la falta de idoneidad en la cuestión legislativa de las y los contratados. Se habla que su cuñada es masoterapeuta, uno de sus sobrinos DJ. En el caso de sus hermanos, se los conoce por su actividad evangelista.
La primera reprimenda que recibió la senadora jujeña fue durante la conferencia de prensa del vocero presidencial: “nosotros (por el espacio político de La Libertad Avanza) estamos absolutamente en contra de cualquier contratación y de cualquier forma de utilización del Estado para intereses personales, familiares, o de cualquiera otra índole que no sea en pos de la intención que tuvo la gente al votar y al elegir una propuesta que claramente marcó una diferencia con la política tradicional”, sostuvo Manuel Adorni.
Sin embargo, la denuncia llegó al propio presidente por parte del abogado constitucionalista y ex integrante del Consejo de la Magistratura, Alejandro Fargosi, quien tuit mediante expuso “el Presidente @JMilei debe ser informado de esto, para que explique a esa senadora de LLA que debe cancelar esas contrataciones familiares. En este y otros temas, tenemos que ayudar al Presidente”.
La respuesta del propio Milei fue “tema arreglado”, dejando entrever la baja de las contrataciones de la senadora Bedia a su familia.
Lo cierto es que apenas asumido, el propio Milei derogó el Decreto 93/2018 en el cual se establecía que familiares de integrantes del Gabinete nacional ya no podrán formar parte del Gobierno, maniobra que realizó para poder nombrar a su hermana Karina como secretaria general de Presidencia, cargo diseñado exclusivamente para ella. Nepotismo en su máxima expresión.